Combatientes del Talibán se apoderaron el domingo de la sede de un distrito en una remota zona montañosa del norte de Afganistán, su ofensiva más reciente en una campaña insurgente para recuperar territorio a medida que las fuerzas extranjeras se retiran del país.
El vocero del ministerio del Interior, Sediq Sediqi, dijo que un grupo de insurgentes ocupó el edificio tras ser evacuado por la policía en el distrito de Karan wa Munjan, en la provincia de Badakhshan.
"Este año el enemigo intenta mostrar su existencia en el norte del país y esa es una de las razones por las que ataca la provincia de Badakhshan", dijo Sediqi.
Destacó las exitosas operaciones de la semana pasada para desalojar a los insurgentes de otro distrito, Wurdoj, y dijo que son realizados preparativos para recuperar la sede recién capturada. Sediqi agregó que los insurgentes controlan un solo edificio, que contaba con una presencia policial muy reducida.
Por lo menos 18 policías afganos murieron en las operaciones de Wurdoj junto con 47 insurgentes, dijo la semana pasada el ministerio. Esas bajas no pudieron ser verificadas.
"Tuvimos una exitosa operación militar en el distrito de Wurdoj y ahora, que han sido derrotados allí donde no pudieron retener su bolsón, decidieron atacar el distrito de Karan wa Munjan", agregó Sediqi. "No hay duda que teníamos menos fuerzas policiales en el distrito, donde no había más de 30 policías en el momento del ataque. Han sido enviados refuerzos".
Aunque los ataques aumentaron contra las fuerzas gubernamentales en Afganistán, son raros en Badakhshan.
La región, entre las cordilleras de Hindu Kush y Pamir, hace frontera con China y Pakistán y es una de las más remotas del país.
En otro incidente, dos personas, una de ellas un policía, murieron y tres civiles resultaron heridos en un ataque suicida frente a una comisaría del distrito de Marjah, en el sur de la provincia de Helmand, dijo el vocero Omar Zwak said./AP