Agentes de la Policía Nacional de España desarticularon un grupo criminal dedicado a la explotación de sexual de mujeres venezolanas captadas a través de las redes sociales.
De acuerdo a lo reseñado por el organismo de seguridad, el modus operandi consiste en que las criollas viajan a España engañadas con falsas ofertas de trabajo para el cuidado de personas mayores.
"Cuando llegaban a nuestro país se les retiraba el pasaporte y eran trasladadas a un club de alterne donde las forzaban a ejercer la prostitución. Una de las víctimas, que se negó a ejercer la prostitución, llegó a ser encerrada durante cinco días para, posteriormente, ser forzada sexualmente", refiere nota de prensa de la Policía Nacional.
Explotación sexual
La investigación comenzó cuando los agentes constataron la existencia de un grupo criminal dedicado, presuntamente, a la trata de personas. El método que utilizaban para captar a las mujeres consiste en contactar a través de redes sociales, a mujeres de origen sudamericano; principalmente de Venezuela, que se encuentran en una clara situación de vulnerabilidad.
Los delincuentes se ganaban su confianza por medio de constante comunicación con ellas y con pequeñas transacciones de dinero que las hacían llegar a modo de "ayuda"; para terminar ofertándoles un trabajo como cuidadoras de personas mayores en España.
El entramado criminal también se ofrecía a cubrir los gastos del viaje y la tramitación de una visa de turista. Una vez caducado el documento las mujeres quedaban en situación irregular, lo que facilitaba su explotación sexual.
Las víctimas aterrizaban en el Aeropuerto Adolfo Suarez-MadridBarajas, donde de manera inmediata se le retiraba el pasaporte; así como las tarjetas y el dinero en efectivo con el que viajaban. De esta manera eran trasladadas a un club de alterne en el que se les obligaba a ejercer la prostitución y a cancelar la deuda contraída.
Lucha contra la cibertrata en la Policía Nacional
Las tecnologías de comunicación modernas como internet, redes sociales y aplicaciones móviles; han tenido un impacto significativo en la forma en que operan los grupos del crimen organizado involucrados en la trata internacional de personas, principalmente para su posterior explotación sexual y laboral.
"Los traficantes están utilizando tecnologías de comunicación cada vez más modernas para explotar a sus víctimas, desde publicitar y reclutar víctimas. Hasta chantajearlas con fotos y videos para controlar sus movimientos", explica la policía.
Como respuesta a ésta amenaza la Policía Nacional ha creado recientemente un grupo específico de Cibertrata. El cual está integrado dentro de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras; con la finalidad de lograr una mayor cooperación internacional y un incremento en la recopilación de evidencias digitales.
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