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“La autopista Francisco Fajardo, como cualquier arteria vial de Venezuela, cuando se genera colapso en el tránsito automotor, es un caldo de cultivo ideal para consumar el delito de robo agravado que se materializa a través de sujetos que emplean la motocicleta para garantizarse una fuga eficaz”, afirma el criminalista venezolano Fermín Mármol García.
Ya es común escuchar los testimonios de personas que han sufrido robos en tramos específicos; no obstante, se han ido esparciendo a lo largo de la arteria vial gracias a que muchos transgresores andan en moto, vehículo cuyo tránsito por la AFF estuvo prohibido por más de 18 años hasta que en el año 2003 el Ministerio de Infraestructura permitió su circulación sin restricciones.
Celulares, joyas y billeteras son los objetos más codiciados por los delincuentes que, en muchos casos, apuntan a sus víctimas con armas de fuego. Pero en la AFF las cosas se han salido de control. Mármol García suma otras situaciones que, aunque no son muy comunes, pasan en la vía. “Es un sitio idóneo para el pago de rescates de secuestros express sobre todo en las noches o madrugadas. Es escogida para que los familiares de las víctimas lancen el botíny se logre la liberación”, indica el especialista.
Cuando las colas bajan, las autopistas puedan ser utilizadas como corredores viales de tránsito de víctimas. Por ello, las autoridades han determinado planes especiales de puntos de observación para hacer cierres en caso de contingencia.
Manuel Tangir, secretario de Seguridad Ciudadana de Baruta, informó que tanto la Policía de ese municipio como los cuerpos de seguridad de los otros ayuntamientos del Área Metropolitana, se encuentran realizando un plan piloto para cuidar las autopistas. En este proyecto que se está implementando desde hace una semana, también están involucradas la Policía Nacional Bolivariana y la Guardia Nacional Bolivariana.
Delitos viales. La ley también se rompe cuando se habla de normas de tránsito, reglas que al ser quebrantadas pueden causar accidentes de tránsito que dejan víctimas fatales. Mármol García asegura que en las noches es común ver conductores irresponsables que exceden los límites de velocidad, y también a aquellos que conducen en estado de embriaguez. Denuncia que no existe auxilio por parte de los cuerpos de seguridad para personas que se quedan accidentadas.
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