Este 6 de diciembre se llevan a cabo los comicios parlamentarios para renovar los diputados de la Asamblea Nacional escogidos en el año 2015 cuando se impuso la oposición venezolana. La Mesa de la Unidad Democrática no participará en este evento, calificado como “fraudulento”, por la falta de garantías que, aseguran, empañan el evento.
Pese a esto, la administración de Nicolás Maduro ordenó al Consejo Nacional Electoral (CNE) llevar adelante las elecciones para escoger nuevos parlamentarios y, según sostienen, poder sacar a la nación de la crisis en la que está sumida.
Para que esto se lleve a cabo, el Poder Electoral habilitó 29 mil 622 mesas electorales a lo largo y ancho del territorio nacional para que los simpatizantes del chavismo y de grupos minoritarios de oposición ejerzan su derecho al voto.
Estas 29 mil 622 mesas electorales fueron instaladas, según la presidenta del CNE, Indira Alfonzo, en los 14 mil 221 centros de votación dispuestos en la nación, estos últimos distribuidos en las 87 circunscripciones electorales.
Para estos comicios electorales, se cambiaron las máquinas de votación. Modelo robusto, compacto con una pantalla digital LCD, que permite la conexión única al sistema de verificación biométrica. De acuerdo a Alfonzo, estos equipos incorporan variables que agilizarán el proceso de escogencia de los parlamentarios.
Además, “cuentan con tecnología de punta y están sujetas a un estricto protocolo en bioseguridad ante la pandemia del COVID-19”. Las cuenta con una red única de transmisión de datos más segura, así como un software que acorta los tiempos para ejercer el voto. Además, baterías integradas que permiten independencia eléctrica en sus funciones. Y herramientas para asistir a las personas con algún tipo de discapacidad.
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