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“Es algo reconfortante, con cada color que te comes es como cavar en una barra de tu dulce favorito”, asegura una joven que se considera adicta a comer maquillaje.
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Lo cierto es que Brittani es la protagonista de esta historia en donde la locura se hace realidad.
“No sabe la gente lo que se pierde”, asegura, la joven que ingiere maquillaje de todo tipo.
Algunas personas tienen un gusto curioso por la comida pero esta chica deja a todos con la boca abierta, por su pasión por consumir maquillaje.
Ella admite que es adicta y a veces logra comer entre 15 y 20 sombras de ojos durante el día. Además dice que le encantan las grises, las blancas y las marrones.
2014-04-03