EFE
Las esposas de los opositores venezolanos presos y en huelga de hambre ratificaron hoy que continuarán en vigilia hasta mañana para pedir la mediación del papa Francisco ante el Gobierno, pese a que el presidente Nicolás Maduro canceló su encuentro con el pontífice.
"Me extraña mucho que el presidente no pueda ir a la reunión con el papa Francisco (…) Vaya o no vaya (Maduro) nosotros seguiremos en vigilia", dijo a Efe la esposa del líder opositor preso Leopoldo López, Lilian Tintori, desde la iglesia de Chiquinquirá, en Caracas, horas después de que Maduro anunciara que no viajaría al Vaticano por "recomendación médica".
Tintori junto a Patricia Gutiérrez y Mitzy Capriles, esposas de los también detenidos Daniel Ceballos y Antonio Ledezma, respectivamente, y decenas de opositores se reunieron en la iglesia ubicada en el este de la capital venezolana para pedir al papa Francisco que mediara por los políticos en un encuentro con Maduro, inicialmente previsto para mañana.
"Seguiremos en vigilia todo el día, toda la noche y todo el día de mañana esperando una señal, un gesto de humanidad", añadió Tintori.
Según Tintori, López, que "no ha comido nada en 13 días y tiene ocho kilos menos", va a levantar la huelga "cuando liberen a los presos políticos" y "pongan la fecha de las elecciones parlamentarias".
Por su parte, la esposa de Ledezma dijo que pese a la cancelación de Maduro de "una cita tan importante con el santo pontífice" espera que algún representante del Gobierno de Venezuela asista.
Maduro, que se excusó por padecer un "gripón" (gripe), y una "otitis", delegó parte de su agenda en Italia al vicepresidente Jorge Arreaza, excepto la cita con el sumo pontífice, que dijo sería reprogramada.
La esposa de Ceballos consideró que "sea hoy, sea mañana o sea luego", el papa Francisco "tiene la extraordinaria oportunidad de poder interceder, sobre todo como una medida humanitaria por quienes hoy privados de la libertad están arriesgando su vida en una huelga de hambre".