Vecinos de la avenida Casanova reclaman por atención en el asfaltado, el cual presenta varios huecos en sus vías, que comprometen la vialidad en la zona.
Miguel Barrios, comerciante, destacó que con el pasar del tiempo los huecos se han vuelto más profundos debido a que no se han sido atendidos “ni una sola vez”.
“Cada vez que pasan carros se van hundiendo más”, resaltó.
De la misma manera, Carlota Martínez destaca que estos huecos han ocasionado varios accidentes, especialmente en la noche porque el alumbrado público no es fuerte y los conductores “no distinguen los huecos”.
Otro vecino comentó que tratan de repararlos al vaciar tierra o cemento pero que debido a las fuertes lluvias “el trabajo se pierde”.
Los consultados resaltan que en dicho sector no hay atención a la seguridad vial puesto que aseguran que los conductores van a altas velocidades, ignorando semáforos o incluso policías.
“Hay poco fiscales en la zona entonces por aquí se la pasan volando”, recalcó Ana Correa, mujer de la tercera edad que reside en la mencionada avenida.
2001 constató en un recorrido que los huecos se expanden por toda la avenida Casanova por lo que sus habitantes esperan que pronto las autoridades competentes “se den una vuelta por allá”, como comentó Ana.
“Nos preocupa que el asfaltado cada vez vaya cediendo más y ponga en peligro nuestra comunidad, ya hemos visto de varios casos donde la vía se hunde por completo y no deberíamos llegar hasta esas instancias”, expresó Carlos Borges, quien también reside en la avenida Casanova.
Conductores irresponsables, cual pista de Fórmula 1
Un detalle importante, explicado por los vecinos, es la falta de “conciencia al manejar” debido a que muchos vehículos van a una velocidad muy alta y esto afecta al asfaltado cuando caen “con toda la fuerza en los huecos”, señala Borges.
Los habitantes destacan que por esta razón los huecos cada vez se hacen más grandes y “taparlo con escombros no sirve de nada”.
Para enfrentar esta problemática, los vecinos piden que haya presencia de fiscales de tránsito para que se mantenga el orden y los autos no manejen tan rápido.
El agua de a poquito y de vez en cuando
Entre los demás problemas en el sector, los vecinos comentan que pueden pasar hasta dos semanas sin agua y “deben sobrevivir” con la que recolectan en potes y pimpinas.
“Esta es un tema en toda Caracas, nos surtimos de manantiales y cisternas”, comentó Juan, un abuelo de la zona.
Mientras que Natalia, quien también reside en dicho sector, expresa que “ya no sorprende que se vaya el agua, sorprende que llegue”.
Los vecinos aseguran que pueden pasar hasta cuatro días sin servicio de agua por tuberías. Señalan que deben pagar hasta 20 dólares para recibir agua de una cisterna. Dicho problema se extiende por varias zonas de Caracas.
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