El cardenal Baltazar Porras, quien al inicio de la ceremonia de beatificación del doctor José Gregorio Hernández exaltó que su figura trasciende al milagro de unir a los venezolanos bajo una misma causa; entregó a los obispos y arzobispos del país las reliquias del nuevo beato.
El Administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Caracas señaló que este es un gesto para que el beato José Gregorio Hernández esté más cercano a cada uno de los rincones de Venezuela.
"Toma cuerpo y entrega de cada uno de estos relicarios confeccionados con manos expertas; contentivo de unas partecita auténtica de su cuerpo, colocado en lugar visible de los mismos con las manos hacendosas de las hermanas siervas de Jesús; bajo la guía de la doctora Silvia Corrales", expresó en el ritual celebrado este viernes en Caracas.
"Esta situación de pandemia nos tiene limitados y encerrados, pero José Gregorio, como en otros tiempos, sale hoy a recorrer el país; sus reliquias lo hacen presentes y cercanos en casa ajena de nuestra diócesis; y en cada uno de nuestros estados tiene un santuario, como un consultorio donde Dios seguirá oyendo las súplicas de nuestro pueblo; y seguirá sanando por intercepción de nuestros paisanos las enfermedades de los cuerpos", manifestó Porras.
Consideró que la beatificación es producto de la devoción y espiritualidad del pueblo que han sido pilares de la popularidad de Hernández.
Resaltó que las reliquias de José Gregorio ya beato llegarán de manera procesional a cada uno de los rincones de Venezuela, porque en todos ellos hay corazones dispuestos a recibirla con cariño y devoción.
Explicó que en la Iglesia Católica, las reliquias tienen un alto significado, que reciben una veneración especial y cuidado porque el cuerpo de los santos y los beatos han sido en la Tierra el templo vivo del espíritu Santo.
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