Sobre la planificación en el proceso educativo…
Comenzaré con una anécdota personal, mientras estaba haciendo ejercicios escuché a un par de señoras conversando.
Una de ellas dice “Teacher, la semana que viene comienzan”; a lo que la profesora responde “Si, la semana que viene es administrativa para planificar, aún no comienzan clases”; a lo que agrega “bueno para entregar la planificación, eso ya está hecho”.
De lo anterior se desprenden dos escenarios:
a) la docente planificó durante el mes de julio o agosto y sólo necesita consignar su trabajo a la coordinación respectiva;
b) la docente traslada la planificación del año anterior y la ajusta al siguiente.
En cualquier caso refleja un comportamiento que no responde a la realidad del aula que le corresponde atender.
Muy probablemente no reconoce la realidad híbrida que la pandemia nos ha dejado en materia educativa. Demuestra la intrascendencia del proceso de planificación en la dinámica escolar.
Además justifica el tratamiento paupérrimo y ofensivo con el cual se decide el sueldo de los profesores en este país.
Cuánto daño hace a la carrera docente simplificar, trivializar o banalizar nuestro trabajo.
La expresión ¡Dar clases! Banaliza un proceso delicado y exigente.
El docente dirige el proceso de enseñanza aprendizaje de sus estudiantes; proceso súper complicado y complejo que exige muchísima preparación y dedicación.
¡Cualquiera no puede ser docente! Cada vez que un maestro o profesor contribuye con la idea de que con una tiza y una pizarra puede “dar una clase”, apoya la premisa de que puede ser sustituido por otro sin preparación y formación adecuada.
Vale la pena destacar el trabajo del Colegio Francia y varias instituciones de AVEC quienes han apostado por un proceso de consultoría y acompañamiento que ayudará a sus docentes a realizar el proceso de planificación educativa durante 5 días consecutivos.
Más de 20 horas de trabajo, que permitirán garantizar novedad, creatividad y decoro en los diseño académicos aplicar durante el primer momento (antes primer lapso).
¿Tanto tiempo para planificar?
¡Si, es necesario! Así como un médico reúne muchísima información antes de operar, un docente requiere de tiempo, organización e ideas frescas para impulsar su acción docente y lo más importante abonar por la Educación de Calidad que todos nuestros estudiantes merecen.
Entre los elementos más importantes a tener en cuenta en la planificación tenemos:
- Priorizar contenidos, temas, estableciendo vasos de comunicación con otras áreas
- Sobre la didáctica: estrategias, alternativas digitales y la motivación estudiantil
- Diseño de actividades asíncronas significativas
- Evaluación estrategias presenciales novedosas
- Evaluación estrategias digitales.
Espero que los docentes que me leen defiendan la idea de lo complejo que es nuestro trabajo. Que juntos rememos por el reconocimiento de nuestra tarea en todos nuestros campos de actuación. Gracias por llegar al final de este artículo.
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