Estimados lectores, en esta oportunidad compartiré con ustedes algunas reflexiones sobre la Generación Z, esto motivado por la entrevista que sostuve con Roman Lozinsky el jueves 01 de febrero en Circuito Éxitos.
Muy probablemente si su edad supera los 40 años, recordará, quizás con cierta nostalgia, las batallas de Mazinger Z.
Mazinger Z vs. Generación Z
Quizás pueda recordar hasta el nombre de sus personajes principales, a pesar de ser nombres japoneses y nada ordinarios.
No obstante, cuando nos mencionan la Generación Z, nuestro conocimiento sobre el tema no es tan firme.
Según Google la “Generación Z, también conocida como posmilénica o centúrica (del inglés centennial)” caracteriza a los nacidos entre mediados de los años 90 hasta mediados de la primera década del 2000.
Quiere decir que hoy tienen entre 19 y 28 años. Están egresando del bachillerato, cursando estudios universitarios o son profesionales en ejercicio.
Entre sus principales características está su afinidad con el mundo digital, su capacidad para resolver diversas actividades de forma simultánea (multitasking), su interés por ser agentes de cambio en las organizaciones donde se desempeñan.
Algunas condiciones se aplican
Podemos seguir presentando características, pero deseo concentrar lo que sigue en sus condiciones para el estudio.
Su vínculo con el mundo digital es permanente y robusto, al punto que muchos pueden dedicarse al desarrollo de contenidos en Redes Sociales. Quizás esta cualidad, se convierte en una gran debilidad en materia académica:
- ¡No escriben!: Si, como lo lee, muchos estudiantes fotografían las pizarras una y otra vez, guardando en memoria digital, lo que antes se escribía en el cuaderno. ¿Esto puede ser una debilidad? Si, lo es. Escribir o copiar de la pizarra es una actividad que exige del cerebro concentración, no solo por trasladar de la pizarra al cuaderno con la mejor precisión posible, sino que también requiere la capacidad cognitiva para incorporar anotaciones, señales que permitan al estudiante recordar, reconocer y recapitular el mensaje que está detrás de sus apuntes.
No se trata de copiar sin analizar, se trata de la oportunidad que ofrece la acción de escribir mientras se analiza y se crean los mensajes que el lector posteriormente podrá decodificar para construir los aprendizajes requeridos.
- ¡Se concentran en el resultado no en el procedimiento! Hay tantas aplicaciones digitales que los estudiantes pueden encontrar la solución a un problema o ejercicio en segundos. En los casos donde el estudiante tiene la licencia completa de la aplicación (paga por el uso de la alternativa digital) puede acceder a diversos procedimientos detallados para llegar al resultado. En los casos donde no se tiene la licencia sólo te muestra el resultado y te anima a pagar para ver más.
Esta actividad más que una dificultad debería ser motivo de felicitación, el alumno está buscando resolver, puede ser la oportunidad para que el docente construya a partir de dicha experiencia.
Confusiones con la APP
No obstante, también puede ser fuente de confusiones al no lograr compaginar lo visto en la App con lo hecho por el docente.
No solo porque el procedimiento puede no estar a su alcance sucede con frecuencia que puede requerir explicaciones que superan los fines académicos del momento.
Algunos lectores pueden estarse preguntando, ¿Por qué es tan importante cumplir con rutas didácticas que parecen no ser eficientes?
No me refiero a la ejecución mecánica de una serie de pasos, en lo absoluto, acá lo importante e indispensable es la habilidad del estudiante por construir las estructuras que sostendrán definiciones más complejas.
Tomemos como ejemplo el médico, requiere operar a un paciente, cada segundo de la operación es una situación para contrastar lo que la teoría predice con las condiciones del enfermo, tomando decisiones en tiempo real sobre lo que está viendo y los caminos que puede o no tomar.
No se puede concentrar en llegar al resultado final, es indispensable reconocer que cada ser humano trae consigo condiciones únicas que facilitarán o no su desempeño.
- ¡Atención, divino tesoro! El proceso de enseñanza aprendizaje, sobre todo en matemáticas, exige de atención y concentración. El mensaje que se envía es complejo y usualmente afectado por las deficiencias en conocimientos, habilidades o destrezas básicas de los estudiantes.
Los estudiantes que se mantienen conectados con el mundo, pendientes del universo que les demanda su atención, con frecuencia se desconectan de la acción didáctica y acomodan información de forma inadecuada en su cuaderno y en su cabeza.
Generación Z y sus complejidades
Las complejidades académicas son muy fuertes, sin dudas, no hay ventajas sin desventajas, a los docentes nos toca orientar a los estudiantes, hacerles ver las debilidades que están detrás del uso inadecuado de los medios digitales.
El uso de los celulares en el aula de clase es sin dudas una oportunidad ideal para diseñar oportunidades de aprendizaje.
No puede malentenderse el mensaje, no se trata de prohibir, se trata de educar y orientar sobre la forma en que podemos hacer uso de la tecnología sin perder la atención de lo verdaderamente importante y esencial.
Agradecido con Roman Lozinski @rlozinski por la oportunidad de conversar sobre este tema tan interesante.
Déjame tus comentarios en [email protected] o @jjaviersalas en Twitter.
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