Hoy tocaremos un tema que hemos conversado previamente, pero consideramos imperativo, repetirlo una vez más.
No deja de sorprendernos como las personas no dan la seriedad debida a los problemas jurídicos; en particular, a los problemas inmobiliarios, tales como arrendamiento, compraventa de inmuebles y condominios.
La compra de un inmueble, bien sea residencial o comercial, así como el alquiler de uno de estos, para iniciar la vida en pareja, o para iniciar algún tipo de negocio son hitos importantes en la vida de cualquier persona.
Cualquiera creería que ante algo tan importante, las personas se aseguran que lo están haciendo bien, pero para nuestra sorpresa no lo hacen.
Problemas inmobiliarios típicos
Muchas personas alquilan, compran, hacen contratos o peor aún, no lo hacen, sin el conocimiento y asesoría adecuada.
Después, cuando surgen los problemas, las personas se sorprenden de lo engorroso del problema, de lo cuesta arriba qué puede ser para solucionarlo, pero sobre todo, de lo costoso que puede llegar a ser.
Recientemente nos dieron un contrato de alquiler, sumamente mal redactado, le decimos al cliente que hay que arreglar algunos aspectos; este habla con la contraparte y la respuesta es que el contador lo hace así.
Que para cambiarlo, hay que pagarle. Con todo respeto al gremio de la contaduría, en este caso era una situación jurídica, no de contaduría.
Lo que nos sorprende, es cómo esa persona, el propietario, pone en manos de un profesional que no es del área algo tan importante como el contrato del inmueble que le va a generar ingresos mensuales.
En este caso en particular, era una sucesión, con muchas personas involucradas y con muchos poderes de representación de por medio.
Pedimos esos poderes, y no los tienen, y preguntaron que por qué los necesitábamos. Ahí, ya podemos ver el desconocimiento en acción.
Por otro lado, en materia de vivienda, nos sorprende como tanta gente entrega dinero sin saber realmente lo que está comprando.
Entregan dinero supuestamente comprando un inmueble, y resulta que lo que están es pagando por ingresar a una asociación civil, que además, ni siquiera le hacen la cesión de derechos correctamente sobre esa asociación civil.
Recientemente, hemos tenido casos que hasta han llegado al Ministerio Público, ya que se involucró con materia penal.
Todavía las personas, en muchos casos, no se asesoran adecuadamente. Pretenden resolver, muy informalmente, un problema jurídico grave; simplemente pretenden solucionar su problema jurídico, llamando al amigo, del primo, de la novia, del esposo, del vecino.
El mejor consejo, la mejor recomendación que podemos hacer desde aquí, desde la Hora de Natale Legal, es, siempre ha sido, y será, que busque y obtenga asesoría adecuadamente y oportunamente.
En el momento adecuado, es decir, antes de hacer el negocio jurídico que desea hacer.
Si busca asesoría después de haberse realizado negocio jurídico, y surge un problema, van a surgir dos consecuencias:
1. el problema va a ser más grave aún; lo cual trae la consecuencia
número 2, que lo va a ser aún más costoso por lo tanto; Repetimos, asesórese adecuadamente antes de realizar cualquier negocio jurídico, y en especial, antes de entregar algún dinero.
Nos pueden enviar sus dudas o comentarios a: [email protected]
Recuerden, con @NataleLegal seguimos en contacto
(Daniel Natale es abogado especializado en condominios e inmuebles)
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