Redacción 2001
En hechos diferentes, suscitados en fiestas callejeras, dos jóvenes perdieron la vida debido a la acción del hampa en Petare. Ambos fallecieron durante la madrugada del domingo como presuntas víctimas de riñas durante sendos festejos.
Los fallecidos fueron identificados como Joseph Abraham Araujo González, de 25 años, y Hernán González Magallanes (21), quienes fueron asesinados en los barrios Sucre y La Dolorita, respectivamente.
Familiares de las víctimas explicaron que los jóvenes estaban en sendas fiestas callejeras, de las denominadas por aquellos que las organizan como "de negocio".
Por una culebra anterior. A las 5:30 am, Joseph Abraham Araujo González salió de una "fiesta de negocio" -donde se venden armas, drogas y alcohol- en el barrio Sucre de Petare, para dirigirse a su casa. A pocos metros del lugar, un sujeto se le acercó y le propinó cinco disparos en el cuerpo.
Deudos de Araujo señalaron que el asesino es un conocido hampón de la zona, con el que Joseph tuvo una discusión anterior; sin embargo, no especificaron qué originó el problema.
"El tipo llegó a la fiesta solo; y como a las 5:30 am, cuando Joseph se iba, lo atacó y le disparó. Un amigo lo auxilió para trasladarlo hasta el hospital Pérez de León, pero fue ingresado sin vida", sostuvo Eylin Araujo, hermana del joven acribillado.
Relató que su hermano trabajaba como mototaxista particular por Petare; además de tener una academia de baile y canto en el barrio Sucre, cuyas actividades eran gratuitas para prevenir a los jóvenes de la zona a no caer en malos pasos inducidos por delincuentes de la zona.
"Joseph fundó ese grupo de baile junto a mi tío y otro hermano; daba clases los martes y jueves. Cultivaba toda clase de géneros musicales con los jóvenes, quienes podían inscribirse desde los cuatro años", agregó. Joseph dejó un hijo de cuatro años, y era el cuarto de seis hermanos. Sus familiares exhortaron a las autoridades a no dejar impune su muerte.
Lo sacaron de la fiesta. A las 3:00 de la madrugada del domingo, en La Dolorita, Petare, la vida del joven Hernán González Magallanes acabó de forma violenta, luego de que un hampón lo sacara de una fiesta para dispararle en tres oportunidades.
Familiares de González relataron que el suceso ocurrió a escasos metros de un comando de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), cuyos efectivos "no hicieron nada" mientras ocurría el ataque criminal contra el joven.
Mari Magallanes, madre del fallecido, explicó que a su hijo le quitaron su teléfono celular, luego de dejarlo tirado en el piso. "Me llamó uno de sus amigos para que lo fuera a auxiliar. Cuando llegué al sitio agarré a mi muchacho y lo lleve al CDI de La Dolorita, pero ya estaba muerto", aseguró la Sra. Mari.
Hernán era estudiante de quinto año, en un parasistema de Petare. Vivía junto a su madre, y laboraba con su padre en un taller de carpintería. "La zona por allí es horrible, uno aprende a sobrevivir por aquí. La Guardia solo pasa para buscar vacuna", dijo.
2016-08-29