El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos (ICE) arrestó a cerca de 30,000 inmigrantes durante el mes de junio.
Según una publicación de Telemundo, esta es la cifra más alta desde noviembre de 2020. No obstante, las deportaciones superaron apenas los 18,000, solo la mitad del número de arrestos.
Esta disparidad se debe, a que muchos detenidos tienen casos de asilo pendientes o la protección temporal de jueces de inmigración que bloquean su deportación.
¿Cómo se compara esta cifra de arrestos migratorios?
Desde febrero, el gobierno de Trump tiene un promedio de 14,700 deportaciones mensuales, muy por debajo del 36,000 en 2013 durante la administración Obama.
Incluso las cifras de deportaciones del gobierno de Biden alcanzaron 12,660. Esta comparación resalta la dificultad de cumplir la promesa de deportar a "millones y millones" de inmigrantes.
¿Qué consecuencias tiene el número de detenciones?
El elevado número de detenciones, sin un ritmo similar de deportaciones, ha provocado hacinamiento en las instalaciones de ICE.
Cerca de 60,000 inmigrantes están recluidos en centros de detención, a pesar de que el Congreso solo financió 41,500 camas.
Los detenidos han denunciado malas condiciones de higiene, atención médica y acceso a servicios básicos. Una portavoz del Departamento de Seguridad Nacional ha negado las acusaciones de condiciones inhumanas.
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