El secretario de Defensa de EE. UU., Pete Hegseth, afirmó que El Pentágono está preparado para utilizar “cualquier recurso necesario” en la expulsión y detención de migrantes sin estatus legal en territorio estadounidense.
Hegseth destacó que el uso de recursos militares para labores migratorias “está sobre la mesa”, incluyendo la posibilidad de enviar migrantes a la base estadounidense en Guantánamo.
Durante su visita a Fort Bliss en El Paso, Texas, Hegseth mencionó que parte de los 1,500 soldados ordenados por el presidente Donald Trump ya han llegado a la frontera, según reseñó El Diario de Nueva York.
Respecto al uso de Guantánamo, el secretario consideró que la base naval es un lugar adecuado para detener a migrantes expulsados y a aquellos que hayan cometido delitos.
Hegseth indicó que se enviarán miembros del Tren de Aragua a Guantánamo antes de ser deportados. Más de 150 militares han llegado a la isla para preparar la ampliación del centro de detención, donde se planea instalar 30,000 camas.
Trump, al firmar el memorando para esta expansión, afirmó que la medida busca “detener a los peores inmigrantes ilegales criminales” que representan una amenaza para la seguridad estadounidense.
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