Un exclusivo trago en Colorado está captando la atención de curiosos y amantes del lujo. Se trata del Martini Dorado, una extravagante creación servida en el bar B&GC, ubicado en un callejón dentro de la antigua oficina postal de Cherry Creek.
Más que una bebida, este martini es una experiencia opulenta: se elabora con ginebra Monkey 47 y vodka Belvedere 10, ambos infusionados con oro de 24 quilates, mezclados con vermú artesanal y aceite de oliva.

La presentación incluye una lámina de oro comestible como adorno, pero eso no es lo más llamativo del pedido.
Lo que realmente eleva el precio del cóctel es el accesorio que lo acompaña: un collar de oro amarillo de 14 quilates con un diamante solitario, valorado en aproximadamente 5.000 dólares.
El martini se sirve dentro de una caja fuerte personalizada y tiene un precio final de 2.500 dólares. Hasta la fecha, nadie lo ha pedido, pero el bar asegura que ya ha despertado el interés de varios visitantes y que está listo para preparar otra versión si alguien se anima a ser su “próximo dueño legítimo”.
Trago de Colorado: de la joyería al menú
Aunque parezca inusual, el oro ha empezado a formar parte de las experiencias gastronómicas de lujo en todo el mundo.
El oro comestible se utiliza como adorno en platos y bebidas premium y debe pasar por un meticuloso proceso de purificación y transformación antes de llegar a la mesa, destaca la web especializada en gastronomía La Gourmetería.
Láminas ultra delgadas, copos y polvo de oro son algunos de los formatos más utilizados para aportar un brillo literal a las creaciones culinarias.
Si bien el Martini Dorado de Denver no ostenta el récord del más caro, sí compite en originalidad. En 2024, un restaurante de Chicago lanzó el Marrow Martini, con un costo de 13.000 dólares gracias a su acompañamiento: un collar con 150 diamantes incrustados.
Visita nuestras secciones: Servicios e Internacionales
Para mantenerte informado sigue nuestros canales en Telegram, WhatsApp y Youtube