Tres personas murieron debido a fuertes lluvias, granizo y tornados que se produjeron por un sistema de tormentas activo y de lento movimiento en Texas y Oklahoma.
Las alertas meteorológicas severas continuaron el domingo, afectando el centro-sur y el centro-norte de Estados Unidos, reseña Dallas al Día.
Durante el Domingo de Pascua, las comunidades comenzaron a evaluar los daños, con 17 eventos de tornados reportados el sábado, de los cuales cinco fueron confirmados en Oklahoma, incluyendo uno que causó daños de al menos categoría EF1 en una ciudad que aún se recuperaba de un tornado en marzo.
Las intensas lluvias provocaron acumulaciones de cinco a 10 centímetros (2 a 4 pulgadas) en el centro-norte de Texas y el centro-este de Oklahoma.
La policía de Moore, cerca de Oklahoma City, recibió numerosos reportes de inundaciones, rescatando a personas de vehículos varados, aunque lamentablemente una mujer y un niño de 12 años fueron hallados muertos.
La tormenta también cobró la vida de una persona en Spaulding, donde un tornado tocó tierra, destruyendo varias viviendas y causando deslaves en las carreteras.
Tornado EF1
El Servicio Meteorológico Nacional indicó que un tornado alcanzó al menos categoría EF1, con vientos de entre 138 y 177 km/h (86 y 110 mph).
En el condado Marshall, un tornado dejó al menos 20 viviendas dañadas, aunque no se reportaron heridos.
En Ada, una ciudad que aún se recupera de un tornado anterior, sufrió daños significativos, con techos y ventanas destruidas.
Al menos dos tornados también cruzaron el oeste del condado Parker, causando daños a varias viviendas.
El sistema de tormentas se desplazó hacia el noreste, afectando Arkansas, Missouri, el sur de Illinois y el sureste de Iowa.
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