Tras el triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, y su reciente toma de posesión, se avivaron los temores de detenciones masivas de inmigrantes.
Esta había sido una de las promesas de Trump durante su campaña. El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) tendría total libertad de realizar estas detenciones según expresó el mandatario.
Sin embargo, según reseña TV Azteca, en estados como Chicago las normativas legales imponen limitaciones significativas al ICE en sus operaciones para arrestar a inmigrantes indocumentados.
¿Qué regulaciones se aplican en el estado?
Estas regulaciones, que se reforzaron en 2021, buscan proteger a las comunidades inmigrantes y fomentar la confianza en las fuerzas del orden. Con esto permiten que las personas denuncien delitos sin temor a represalias migratorias.
Desde 2017, las leyes estatales prohíben que la policía local detenga o interrogue a individuos basándose en su estatus migratorio, y no pueden coordinar entregas de detenidos con el ICE.
Estas políticas fueron fortalecidas por el gobernador JB Pritzker, reafirmando a Chicago como una ciudad santuario que no actúa como extensión de ICE.
Aunque estas medidas tienen como objetivo la seguridad de las comunidades, han generado críticas por parte de quienes consideran que pueden comprometer la seguridad pública.
Recomendaciones
Organizaciones como The Resurrection Project se dedican a educar a las comunidades sobre sus derechos frente a operativos migratorios, recomendando no abrir la puerta a agentes de ICE sin una orden judicial y buscar asesoría legal.
Pritzker defiende los derechos de los migrantes, aunque también sostiene que aquellos condenados por delitos violentos deben ser deportados.