María Isabel Rangel
En las diferentes carreteras de Caracas existen los llamados refugios motorizados, que son zonas específicas para el descanso de motorizados que transitan por las autopistas o para resguardarse de la lluvia y así evitar accidentes.
“Si nos ayudan pero las personas dañan su funcionalidad y los usan para fines externos, como la indigencia, los desechos de basura y el consumo de alcohol y drogas”, compartió un motorizado caraqueño.
Echan una mano
Winston García, motorizado señaló que “recientemente muchos refugios fueron reparados y rehabilitados puesto que cuando se instalaron estos eran de láminas de zinc o vidrios que le daban un mejor aspecto, lo hacían lucir más bonito, pero lamentablemente en el último año muchos delincuentes optaron por robar estos materiales en horas de la madrugada y los refugios dejaron de refugiar, básicamente”.
El entrevistado esperaba en el refugio de motorizados en Caricuao, cerca de la estación de servicio Las Maravillas.
“Hace como siete meses tuvieron que cambiarla y soldarla con láminas de metal para que no volvieran a robárselas, porque era posible que se instalaran láminas de vidrio y la semana fueran hurtadas nuevamente”, comentó el consultado.
García destacó que estos puntos se mantienen limpios, sin embargo “siempre hay quien no cuida”.
Benditos sean
Por otra parte, José Pascal, quien trabaja como delivery resaltó que los refugios son una “bendición” para estos trabajadores.
“Como transportamos mercancía a veces empieza a llover y tenemos que esperar en los refugios para que los pedidos no se dañen y para que nosotros también nos cuidemos físicamente”. El joven destacó que en el distribuidor Los Ruices es donde más se llena de deliverys resguardándose de la lluvia o incluso el sol.
En horas de la mañana y la tarde “mientras no llueva” los refugios no presentan una congestión de motorizados, aparte de aquellos que necesitan examinar sus motos o están parados haciendo una llamada telefónica.
Lo positivo
Puntos positivos. La urbanista Graciela Medina señaló que la principal función de los refugios es proteger de la lluvia a los motorizados, para que no sufran accidentes y tampoco se congestionen las vías, puesto que antes de la instalación de estos puntos, los motorizados se refugiaban bajo los puentes lo que causaba la restricción del paso vehicular.
“Estos podrían declararse como una excelente inversión porque si tiene impactos positivos para los conductores, y no solo los de motos. Los refugios también sirven como puntos de orientación y de encuentro para muchos viajeros que por circunstancias alternas presentan algún problema en sus carros y deben pararse”, destacó la profesional.
Lo malo
Entre los puntos negativos señaló que hay poca seguridad, lo que puede causar robos a las personas que esperan en refugios solos.
“Suelen ser lugares solos cuando no hay lluvia y muchas veces las bandas criminales esperan que algun motorizado haga una parada en este punto porque necesitan hacer una llamada o revisar la moto para ellos robarle sus pertenencias”, compartió la profesional.
Además señaló que otro de los problemas es la indigencía en Caracas, “Es muy común ver a personas en situación de calle resguardandose en los refugios de motorizados, especialmente para dormir. Debido a que son espacios públicos cualquier persona puede estar allí a la hora que desee, sin embargo el problema se agrava cuando este grupo de individuos se apoderan del refugio y tienen accesorios personales, desde ropa hasta almohadas”, señaló.
Agregó que muchas veces incluso los motorizados y conductores en general utilizan estos espacios como baños.
“Se necesita un patrullaje constante por los puntos para verificar que no haya nadie incumpliendo con la finalidad del refugio”.
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