El Gobierno chileno expulsó a 56 migrantes venezolanos, como consecuencia de haber cometido delitos e ingresar de forma irregular al país, en una nueva deportación realizada este domingo, informó el ministro del Interior, Rodrigo Delgado.
Las 56 personas venezolanas partieron del Aeropuerto de Santiago en un avión comercial arrendado por el Gobierno chileno; y tras realizar una escala en la ciudad de Iquique, en el norte del país, fueron trasladadas a Caracas, indicó Delgado a la prensa.
El ministro explicó que una veintena de migrantes "ya cumplían condenas por delitos referidos a tráfico de personas, narcotráfico y robo con violencia"; y el resto "entraron de manera clandestina a Chile". El funcionario agregó que "el proceso se lleva a cabo siguiendo cada detalle de la legislación vigente; de los acuerdos internacionales siguiendo los protocolos, indicaciones y recomendaciones de la ONU".
Organizaciones de defensa de inmigrantes, que confirmaron la nacionalidad de las personas expulsadas, protestaron por esta nueva deportación, al tiempo que un grupo de expertos de derechos humanos de las Naciones Unidas indicó -en mayo pasado- que las personas migrantes "tienen derecho a una evaluación individual de sus casos y a quedarse en el país mientras se considera su situación migratoria".
EFE
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