Conservar la calma es fundamental para el bienestar del ser humano, pues con ello se logra bajar el ritmo cardiaco y así evitas daños en el corazón, por ejemplo.
Además, cuando aprendes a mantener la calma respiras profundo y le otorgas al cuerpo la posibilidad de oxigenar los tejidos; también, permaneces tranquilo, en un estado de paciencia, serenidad y optimismo que beneficia todo tu ser.
¿Cómo debo conservar la calma?
Es normal enfrentarnos a situaciones difíciles y conflictivas en las que suele ser complicado mantener la serenidad. Sin embargo, es necesario aprender a controlar las emociones y sobreponernos a las situaciones.
Existen muchas maneras de lograrlo, por ejemplo, organizarse, hacer ejercicio y descansar, entre otras; ayuda a mantener el control, sobre todo, porque nos prepara para las situaciones de crisis.
Es decir, si trabajas de manera organizada todo fluirá de mejor manera, y aunque los imprevistos se pueden presentar, es probable que logres solventarlo sin llegar al desespero.
De igual manera, es probable que, si estás respetando tus horas de sueño, te mantengas activo durante el día y puedas cumplir con tus actividades de la mejor manera posible, sin tener que estresarte.
Por tanto, es necesario aprender a identificar las señales que nos manda el cuerpo, respirar y contar hasta 10, alejarse de la situación, tomar aire puro, y concentrar toda la atención en otra cosa.
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Recomendaciones
Expertos en el cuidado de la salud mental sugieren que las personas que se encuentran asustadas, estresadas, ansiosas, etc., deben aprender a dominar estas emociones para así conservar la calma. Para ello es necesario:
1. Respirar de forma consciente.
2. Aprender a escuchar su cuerpo y atender las señales que le muestra.
3. Realizar ejercicios para el cuerpo y la mente.
4. Descansar, dormir mínimo ocho horas diarias.
5. Concentrarse y vivir el presente.
6. Evitar los pensamientos negativos.
7. Desconectarse del mundo exterior.
8. Meditar.
9. Comer de manera saludable.
10. Desatender lo que no depende de uno mismo.
11. Mantener las rutinas que brindan seguridad en el día a día.
12. Pensar en cosas diferentes a lo que te genera la crisis, por ejemplo, en algo que te haga sonreír.
13. Hablar con alguien que no tenga que ver con la situación.
14. Darse un baño.
15. Escuchar música.
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2023-06-15
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