Las rosas son las plantas preferidas y codiciadas por los amantes de la jardinería, su belleza natural adorna el interior de la casa y el aroma que desprende cautiva el lugar. Sin embargo, para conseguir un hermoso rosal debe tener en cuentas ciertos cuidados esenciales.
Lo primero que debe hacer es consultar con un experto que tipo de rosas puede plantar en casa, ya que existe gran variedad de especies de rosales. Para el hogar las más apropiadas son los rosales pitimuni o rosales mini. Estas las puede conseguir en viveros.
Rosas en maceta
Las rosas tienen la capacidad de adaptarse al sitio donde se siembra. Busque una maceta lo suficientemente grande y alta para que las raíces de la rosa puedan extenderse en el fondo.
Si ya las tiene plantadas en macetas y las quiere lucir dentro del interior de la casa, debe ubicarla en un sitio que entre un poco de luz solar y tenga especial atención que no le de directamente la corriente de aire ya que ésta puede afectar el desarrollo de las flores. A medida que las flores se marchiten retírelas cuidadosamente evitando dañar las yemas del rosal.
Rosas en el jardín
Para plantarlas directamente en el patio debe remover la tierra y el mejor momento para hacer este trabajo es a finales de marzo comenzado abril. Prepare la tierra con un pH ligeramente ácido a casi neutral. Si quiere conseguir rosas fuertes y hermosas debe nutrirlas para ello busque en los viveros fertilizantes que le favorezcan.
Recomendaciones generales:
1 Se plantan a raíz desnuda, en la fecha de diciembre a marzo en el jardín.
2 En maceta se pueden plantar en cualquier época del año.
3 La mata de rosal necesita una exposición muy soleada. Busque el sitio más idóneo para que le de el sol pero que no sea de manera directa.
4 Hay que regarlas poco, evitando mojar sus hojas; el exceso de humedad provoca el ataque de hongos.
5 La tierra debe tener un alto porcentaje de materia orgánica (estiércol)
6 La poda, drástica se realiza en noviembre y diciembre. En agosto se puede podar dos terceras partes.
7 El mejor abono es el estiércol que debería aportar cada año, completando con químico muy rico en fósforo y potasio.
8 Las matas de rosas se adaptan perfectamente a cualquier tipo de clima.
9 El cultivo en maceta requiere cuidados especiales: cortar dos terceras partes de sus raíces cada tres o cuatro años y volverlos a plantar en el mismo recipiente con tierra nueva.
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