Tanto los niños como los adultos sienten una debilidad por los dulces, y es que sin duda, un bocado de la golosina favorita puede hacer estallar de felicidad a cualquiera; pero, qué ocurre con la salud de los niños cuando se consumen estas delicias.
Las golosinas contienen glucosa que es el combustible para las neuronas del cerebro y brindan energía; es por ello que al ingerir en grandes cantidades, los niños se vuelven enérgicos y muchas veces parecen fuera de control; no obstante, eso no es lo más delicado, pues su ingesta en demasía puede causar desbalances en el cuerpo, e incluso obesidad infantil.
Expertos recomiendan que los niños no deberían consumir más de 25 a 30 gramos de azúcar diaria
Los niños y el consumo de chucherías
Las golosinas contienen grasas de origen animal, y cuyo exceso favorece el aumento del colesterol y desarrollo de la aterosclerosis.
Además, muchos de los ingredientes que componen las golosinas no forman parte de una dieta saludable, pues son elaborados con grandes cantidades de azúcar y grasas.
Por otra parte, contienen colorantes y preservantes que al ser consumidos por los niños en exceso, pueden acarrear cólicos, flatulencias, distención abdominal, diarrea y vómitos.
Stop al chocolate
Debe evitarse darle chocolate a los niños pequeños porque el contenido de ácido oxálico que contiene, disminuye la absorción del calcio tan importante en la etapa de crecimiento.
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Caries en los niños
Estudios científicos han demostrado que el azúcar en la boca se convierte en ácido que dura aproximadamente media hora dañando los dientes después de consumido, por lo que un abuso en la ingesta de golosinas, incrementa el riesgo de presentar problemas odontológicos y sobre todo caries.
Helados
Las bajas temperaturas sumado a la alta concentración de azúcar en los helados, retarda la evacuación gástrica; por lo que se sugiere administrarse como postre, pero no entre comidas.
Colorantes
Los colorantes son el aditivo perfecto para hacer más atractivo los dulces, pero también son el componente más inútil y perjudicial, sobre todo en niños menores de 2 años y en aquellos que presentan urticarias en la piel, rinitis alérgica e hiperactividad.
Inapetencia en los niños
Entre los problemas de salud que se pueden presentar por el consumo de golosinas se encuentra la inapetencia y todo lo que ello conlleva; ya que las soluciones glucosadas presentes en ellas, y la concentración de azúcar en el estómago, cierran el esfínter pilórico.
Recomendaciones
– Restringe el consumo de golosinas a una vez por semana.
– Sustituye los postres por frutas, cereales y frutos frescos; estos últimos, deben ser limitados porque poseen un alto valor calórico.
– No mezcles dos o más alimentos con azúcar en la misma comida; es decir, no combines cereal azucarado con jugo, por ejemplo, en el desayuno.
– Evita suministrarle bebidas carbonatadas o refrescos.
– Los jugos y teteros de los bebés no deben ser endulzados con azúcar.
– Jamás utilices los dulces como premio o recompensa a la conducta de los niños.
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2021-12-28
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