El feng shui, un verdadero arte que combina la filosofía, la sabiduría, en un campo que abarca un movimiento complejo no solo en el diseño interior sino en el general.
Si bien tiene mucho que ver con el ambiente exterior del hogar, donde más se ha popularizado su aplicación es en la decoración de los ambientes de la casa para alcanzar la armonización de las energías basado en los principios milenarios de la técnica oriental.
Los colores
Si te estás planteando volver a pintar las paredes de tu hogar no elijas un color al azar, ya que de acuerdo con esta técnica cada color tiene un significado específico. Por ejemplo: el verde tiene un poder relajante y esto es especialmente adecuado para un dormitorio; el amarillo, que evoca al sol, es ideal para la sala o la terraza.
El feng shui y la decoración de espacios
Sala
Desde el punto de vista de este tipo de prácticas, uno de los puntos más importantes de la casa es la puerta, que es la boca del Chi (término que se usa para referirse a la energía). Para este lugar es necesario elegir un color de su preferencia. El durazno y el salmón son muy recomendables, también el amarillo si tiene muy poca luz natural.
Imagina que al entrar a tu hogar encuentras enseguida un lugar en donde dejar lo que traes en la mano: bolsos, carteras, paraguas, entre otros. Luego notas fotos de la familia sintiendo así la paz, la tranquilidad y felicidad de haber llegado a casa.
Habitaciones
El dormitorio es uno de los ambientes más importantes en una casa, pues durante el sueño somos más vulnerables a las energías del entorno. La correcta ubicación de la cama es el punto más crucial.
Este lugar necesita de la energía del yin para el buen descanso, como las paredes o tabiques sin ventanas o puertas, ya que implican estabilidad y quietud; por lo tanto, la cabecera de la cama debe, preferiblemente, tener detrás alguna de éstas para asegurarse así que se recibirá una buena energía. Las puertas y ventanas son yang, pues implican movimiento, exposición y luz.
Cocina
La cocina es un lugar de trabajo y movimiento, pero si se encuentra en el centro es equivalente a un corazón agitado e inquieto. Los colores más apropiados son el amarillo y los colores naturales, como el verde que también es una buena alternativa.
En la cocina deben estar presentes el elementos agua y fuego, expresados por el lavaplatos y las hornillas o el horno. El agua apaga al fuego y como este elemento representa el entusiasmo y la alegría de vivir, cuando en la cocina, el agua y fuego quedan en mala relación, en la casa faltará alegría y eventos felices, especialmente en la pareja.
Baño
Básicamente se necesita que el cuarto de baño tenga todas sus instalaciones en buen estado: grifos, puertas y ventanas deben cerrar perfectamente. La sensación que debe dar este sitio debe ser de intimidad y seguridad. Es ideal que el área del inodoro esté completamente separada de la bañera.
Es necesario eliminar de acá todo lo que no tenga que ver con el aseo personal e incluso evitar el uso de tendederos de ropa. Por el contrario, sería bueno colocar fragancias naturales, evitando así el uso de los perfumes artificiales de aerosol. El baño no es un lugar de drenaje de energías, sin embargo su posición dentro del plano de la casa puede ser relevante. En toda casa hay sectores de energía positiva y negativa.
Feng shui: toma el control
– No es conveniente que el espejo que refleje la cama, puede generar un efecto inquietante y perturbar el descanso
– Es preferible para los dormitorios la forma cuadrada o un rectángulo cercano a un cuadrado, pues es la geometría que corresponde al elemento tierra y la que aporta mayor estabilidad y equilibrio al Chi
– Macetas con plantas aromáticas o un grupo de utensilios de cocina fabricados con madera, pueden cumplir muy bien la función mediadora y armonizar el espacio.
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