La felicidad es un estado emocional, es la sensación de bienestar y de realización personal que experimentan al alcanzar las metas, deseos y propósitos. La felicidad es un momento de satisfacción duradero que no permite sufrimientos que atormenten.
Ser feliz es el deseo de la humanidad y partiendo de ello, diferentes estudiosos se han dedicado a analizar todo lo que involucra ese estado emocional, y las conclusiones son tan variadas como investigaciones se han realizado sobre el tema.
¿Qué debes hacer para lograr la felicidad?
La gente feliz no se queda sentada. La gente feliz se esfuerza para lograr nuevos objetivos, aprender un nuevo idioma, atender a su familia, criar a sus hijos, en fin; para alcanzar la felicidad se necesita trabajar por y para ello.
Sin duda, la felicidad consiste en perseguir objetivos vitales, en trabajar duro para lograr un objetivo, y hacer progresos en su consecución; pues activa emociones positivas y, lo que es más importante, suprime las negativas, como el miedo o la depresión.
Hacer amigos da la felicidad
Mantener relaciones de amistad influye de manera significativa en el bienestar de todas las personas.
Estudios demuestran que las personas que tienen menos de 5 amigos sólo tienen un 40% de posibilidades de ser felices.
Las personas que están muy satisfechas con sus vidas tienen dos veces el número de amigos que las personas que están muy insatisfechas. Sólo a partir de los 10 amigos la gente tiene más tendencia a la felicidad que hacia la infelicidad.
Por ejemplo, en Dinamarca, el país donde hay más gente feliz, existe un mayor porcentaje de personas que participan en actividades colectivas, un 92%. Este tipo de actividad social hace que disminuya el número de personas que se encuentran solas y que aumente el número de amistades de la población.
Apunta las cosas buenas que te ocurren cada día
La gratitud está asociado a la satisfacción y a todas las cosas buenas que se derivan de ella, incluida la felicidad.
Según el profesor Martin Seligman, de la Universidad de Pensilvania, la manera más sencilla de experimentar la gratitud es apuntar todos los días tres cosas buenas que te hayan pasado a lo largo de la jornada. El investigador comprobó en un experimento que las personas que establecían esta rutina eran más felices que los que no lo hacían.
Evita la rutina
La gente que vive más aventuras y huye de la rutina es, por lo general, más feliz que la gente que hace todos los días lo mismo.
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Anticipa tu felicidad
Según han certificado diversos estudios, la felicidad aumenta en la vida si se tiene en mente vivir experiencias que se sabe van a proporcionarla, aunque no se estén disfrutando en ese momento. La gente es más feliz en su trabajo cuando sabe que queda poco para las vacaciones, y el viernes se es más feliz que el lunes si se sabe que le espera un fin de semana prometedor. Pensar en algo que le va a hacer feliz hace más felices.
Daniel Gilbert, en su libro Stumbling on Happiness (Vintage, 2007), ahonda en el concepto de la previsión del placer que, asegura, puede permitir exprimir el doble las situaciones que nos hacen felices. En un experimento, un grupo de personas fueron invitadas a cenar gratis en un buen restaurante francés. Se les dio a elegir el momento en que iban a cenar. Las personas que retrasaron más tiempo la cena fueron las que reportaron una mayor felicidad pues no sólo disfrutaron de la velada, además disfrutaron pensando lo bien que lo iban a pasar con un buen champán y una cuantiosa ración de ostras.
Busca el amor
El amor tiene una gran incidencia en la felicidad, algo que han comprobado cientos de estudios. Estadísticamente, la gente que mantiene una relación es, de media, más feliz que aquellas personas que no tienen pareja. En conclusión, el amor es fundamental para la felicidad.
Sonreír
Sonreír y mantener expresiones faciales similares a la de la sonrisa, porque generan ciertas reacciones cerebrales que se asocian a la felicidad.
En definitiva, si se sonríe, aunque el estado de humor no esté predispuesto a ello, la persona será un poco más feliz.
Sé generoso
La felicidad no reside tanto en tener, sino en el dar. Es decir, ser compasivos y generosos con los demás incrementa los niveles de bienestar en todos los ámbitos de la vida.
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2021-06-28
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