Andreína Domínguez
Ante la crítica situación económica que cada día golpea el poder adquisitivo de los venezolanos, el 62% de la población desea sustituir el bolívar por el dólar como la moneda oficial, así lo revela la última encuesta de la firma DatinCorp.
Según el presidente de la empresa, Jesús Seguías, el estudio “Coyuntura País” que consultó a 1.200 personas este mes de marzo, demostró que la mayoría de los criollos está consciente del poco valor que hoy representa la moneda nacional, producto de la devaluación y la galopante inflación. Por lo que una dolarización en estos momentos sería lo más conveniente para el país.
Aceptó que esta medida tendría sus dificultades, por el tema de la Constitución Nacional la cual establece que el bolívar es la moneda de curso legal, pero que hay alternativas, como la ampliación de una caja de conversión, “en donde nuestra moneda tenga el mismo valor que el dólar, como en el caso de Panamá”, explicó.
Confianza y credibilidad. En este sentido, aseguró que el proceso de dolarización es el más atractivo para los inversionistas internacionales, porque generaría un escenario de mayor confianza, el cual ha perdido el actual Gobierno.
Para Seguías, en Venezuela no hay una crisis económica sino una profunda crisis de confianza, por lo que si el Gobierno decidiera dar un vuelco radical a su estrategia económica, a un nuevo marco jurídico que se respete, la realidad sería otra.
“En Venezuela hay que crear confianza, los inversionistas vendrían en cantidad (…) Lo único que compete en este instante son decisiones radicales”, insistió al tiempo que invitó al Ejecutivo a asumir con “valentía política” los cambios que deben hacerse en materia económica.
Impacto. A su juicio, esta medida -que puede ser tomada por opositores y chavistas-, significaría la eliminación “en seco” de muchos vicios como “la corrupción, el mal manejo de la divisa y el tema inflacionario”. Del mismo modo, afirmó que la dolarización debe hacerse de “inmediato” , pues produciría cambios significativos. Agregó que no afectaría a la industria petrolera puesto que aún ésta genera un flujo de caja en divisas “interesante” a pesar de los bajos precios del crudo.
2017-03-29