El gobierno cubano expresó su respaldo a Venezuela en medio de la crisis diplomática con Colombia, y acusó a la oposición venezolana de "golpista" y de "campañas antidemocráticas" para desestabilizar al gobierno de Caracas.
"Cuba tiene una invariable posición de solidaridad con Venezuela y de reconocimiento al gobierno legítimo que encabeza el presidente Nicolás Maduro", dijo el canciller cubano, Bruno Rodríguez, a la agencia Prensa Latina.
Al igual que el gobierno de Maduro, Rodríguez acusó duramente a la oposición venezolana nucleada en torno al gobernador del estado de Miranda, Henrique Capriles.
"La oligarquía golpista, al servicio de grupos de poder de los Estados Unidos, realiza una campaña antidemocrática contra la institucionalidad de Venezuela con el propósito de desestabilizar al país", señaló.
El ministro cubano también criticó cualquier apoyo "directo o indirecto" a la oposición venezolana. Una reunión entre Capriles y el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, causó esta semana una fuerte crisis entre Bogotá y Caracas.
Maduro y otros altos líderes chavistas acusaron a Santos de fomentar "conspiraciones" contra Venezuela.
Capriles, derrotado por un mínimo margen en las elecciones presidenciales de abril, no ha reconocido el triunfo de Maduro y acusa al chavismo de fraude.
Los duros ataques desde Caracas causaron una tormenta política entre ambos países vecinos. Santos rechazó el viernes como "descabelladas" las acusaciones de Venezuela.
"Es descabellado pensar que el gobierno colombiano está enterado o, peor aún, que esté apoyando algún tipo de acción para desestabilizar el gobierno de Venezuela", dijo el mandatario colombiano.
La crisis entre ambos países también ha puesto en riesgo el papel que cumple Venezuela en el proceso de paz del gobierno de Santos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
La guerrilla dialoga desde hace medio año con el gobierno colombiano en Cuba. Maduro amenazó esta semana con replantearse el papel de Venezuela en dicho proceso, en el que actúa de acompañante junto a Chile y a los países garantes Cuba y Noruega.
Círculos cercanos al ex presidente colombiano Álvaro Uribe criticaron también la participación de Venezuela en las negociaciones de paz por su cercanía a la guerrilla.
El fallecido presidente Hugo Chávez fue una pieza clave para poner en marcha el diálogo abierto en octubre de 2012 en Oslo./DPA