Daisy Galaviz [email protected]
Hacer un curso en una academia o instituto genera menos gastos, noches de desvelos, y sacrificios que una carrera universitaria; lo que es indispensable para cualquier persona que desee ingresos y a la brevedad.
La crisis a la cual se ve sometida Venezuela hace que muchos jóvenes renuncien al deseo de una profesión y tomen la decisión de hacer cursos como manicuristas, maquillistas, peluqueros, barberos, secretariado, chefs internacionales o bartenders.
Un ejemplo es el “boom” actual de los institutos gastronómicos, y aunque este incremento en la demanda ha hecho que ya no sea una profesionalización económica, el tiempo si sigue siendo el mis- mo pues para hacerse chef internacional solo se debe esperar un año y medio.
El chef Luis Castillo, quien imparte clases en el High Training Educational Institute, de Santa Mónica, relata que tiene 17 años desempeñándose como cocinero y “nunca había visto tanta motivación por estudiar este oficio”; sin embargo asegura que esa demanda es generada por chamos que desean marcharse del país lo más pronto posible “y saben que con un título de cocina consiguen empleo en cualquier lado”.
Para estudiar cocina en este instituto se deben aprobar 10 módulos y cada mes cancelar 64 mil bolívares, con la condición de llevar los ingredientes que se necesiten para las recetas a preparar.
En el Centro de Capacitación Profesional, en Plaza Venezuela, el curso dura 9 meses (12 semanas de teoría y 24 de práctica) y se obtiene el certificado de Especialista en Artes Culinarios; se debe cancelar mensualmente 120 mil bolívares y pagar una inscripción de 95 mil.
Para realizar un curso de pastelería, por ocho semanas, se requiere reunir 320 mil bolívares; es de destacar que en este instituto dan el “mise and place”.
Más por menos. Si estos montos se comparan con lo que hoy día vale una carrera de cinco años en una universidad privada, los mismos se quedan cortos, pues en la Universidad Santa María un estudiante de primer semestre de Comunicación Social debe cancelar 120 mil bolívares por matriculación y escolaridad, si este monto se multiplica por diez semestres la profesión le saldrá en Un millón 200 mil bolívares, solo si la inflación no sigue avanzando.
En el mismo tono está la Universidad Católica Andrés Bello, los nuevos ingresos de carreras como ingeniería o comunicación social deben tener 199 mil bolívares para cursar su primer período. Profesiones como derecho, contaduría, administración y eco- nomía, son un poco más económicas, y piden 190 mil.
En el país además del auge de los chefs y bartenders siguen encabezando la lista de oficios más buscados los referentes a la estética y belleza. En el Centro de Formación Profesional “Haydé Rodríguez” el diplomado de cosmiatría dura dos años y la inscripción vale 2 mil 500 bolívares y su mensualidad es de 5 mil 500; el de estética integral y corporal sale en lo mismo, pero hay que decir que cada tres meses hacen un incremento de 20%.
El curso de maquillaje profesional está en 10 mil 500 bolívares por clase, y dura dos meses. El mismo costo tienen los talleres de depilación y son por tres meses. Para hacerse peluquera en el Instituto Cetbe, de Sabana Grande, se debe invertir 30 mil bolívares y se aprende a secar, cortar, y pintar el cabello.
2016-12-06