Deisy Martínez
Quienes se quedaron en Venezuela habían experimentado desde hace un tiempo un descenso notable en el tráfico vehicular, especialmente en Caracas. Más de uno comentó con asombro cómo llegaba en cuestión de minutos de un lado a otro de la capital y que ya no debía levantarse tan temprano para trasladarse en su carro o en transporte superficial hacia su trabajo.
Para junio de 2018, la Sociedad Venezolana de Ingenieros de Transporte y Vialidad (Sotravial) habló de 25% de reducción de los viajes habituales en el área metropolitana de Caracas. El nuevo panorama en calles y avenidas encontró explicación tanto en la diáspora como en la cantidad de automotores varados (particulares y transporte público) por la falta de repuestos, bien sea por escasez o por los altos costos (en dólares).
Pero últimamente han vuelto las colas y quienes se habían acostumbrado ya a la tranquilidad en las vías ven con extrañeza el retorno de largas filas de vehículos en calles, avenidas y autopistas de algunos puntos caraqueños y principales ciudades del país. Al respecto, usuarios y expertos enumeran una serie de razones, aunque todos concuerdan en que el caos no llega a la magnitud de épocas pasadas.
“Las colas las estamos viendo en las vías principales, en la autopista Francisco Fajardo, el tramo más demandado por donde pasa la mayoría de las conexiones entre Altamira y el ciempiés (conecta la Fajardo con la Prados del Este), también se observan en la Cota Mil principalmente la conexión con el distribuidor Metropolitano porque son nodos de distribución de tráfico, entonces se ve congestión pero son muy puntuales.
La otra es la avenida Francisco de Miranda a la altura de Chacao porque desde Chacaíto- Altamira- Parque del Este son nodos de comunicación que están muy demandados, la avenida Sucre de Catia, pero no se ve la misma cantidad de vehículos de hace unos años ni las colas que se hacían”, expresó el ingeniero experto en sistemas de transporte Ricardo Sansone.
El coordinador general de la ONG Familia Metro indicó que ha influido que las personas no encuentran respuesta en el transporte público superficial porque no hay suficiente cantidad, ni en el subterráneo (las fallas en el Metro de Caracas son constantes y la falta de unidades de metrobús) por lo que quienes no usaban su carro para ir a trabajar para evitar mayor deterioro lo están usando de nuevo además, señaló, se están empleando vehículos no aptos, como los autobuses escolares. para el transporte público lo cual aumenta el tráfico.
Suma de factores
La ingeniero civil, especialista en Diseño de Carreteras, Celia Herrera se refirió a factores como el tradicional incremento del flujo vehicular en las proximidades de diciembre, cuando ingresa cierta cantidad de dinero adicional a las familias producto de las bonificaciones y se agiliza la economía porque hay unas compras asociadas a las actividades navideñas, regalos, alimentación, entre otras, para luego bajar en enero como siempre.
Asimismo, a la presencia diaria de trabajadores en las vías como parte del denominado Plan Caracas Juntos Todo es Posible. Estas personas realizan labores de desmalezamiento de los laterales, repicado, pintado y frisado de brocales, así como de divisores centrales en algunas vías como la Francisco Fajardo, donde además en algunos tramos se hizo demolición de la isla central, así como la restitución y limpieza de drenajes, lo cual provoca que de 4 canales solo queden 3 o 2 para que los conductores circulen y en el caso de la avenida Boyacá (Cota Mil) solo uno y se haga lento el tránsito.
La directora de la Escuela de Ingeniería Civil de la Universidad Central de Venezuela expresó sus dudas de que la migración interna (calculada en 8% por Datanálisis) desde ciudades en condiciones precarias como Maracaibo hacia Caracas y Mérida como principales destinos, sea la razón de fondo del regreso de las colas. No cree que la mayoría de estas personas se hayan venido con vehículo propio.
Sin embargo, otros expertos no le restan preponderancia a este factor, ya que es visible que muchas personas han acudido a la capital provenientes del interior, para resolver problemas de suministro de alimentos y sobre todo, de salud. “Habría que hacer una medición, es decir, un conteo de volúmenes de tráfico para contrastar con meses o años atrás en los mismos períodos“, dijo Herrera.
2019-11-17
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