Jhuansukivy Betancourt
Como todos los domingos, las iglesias católicas acostumbran a realizar las misas durante el día para honrar a Dios. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo es la frase que les permite a todos los feligreses saber que este acto está comenzando, pero en la actualidad, varios sacerdotes del país, lo primero que mencionan es que “padecen” la falta de hostias y vino de consagrar.
En la ceremonia dominical que realizan en el templo de Betania, ubicado en Cúa, estado Miranda, el sacerdote encargado informó que “no tenemos vino de consagrar, porque no nos han dado dólares en Cadivi para importar el que está permitido por el Vaticano”.
La empresa encargada en el país de fabricar este producto “Ecclesia” utilizado en las misas, es Bodegas Pomar”, y los mismos “no puede garantizar la producción constante y distribución regular, por la falta de algunos insumos que deben importar para embotellar dicho producto”, dijo el padre de Betania.
Antecedentes
En mayo de 2013, iglesias del Distrito Capital, Miranda, Carabobo, Mérida, Trujillo y Zulia indicaron que la falta de inventarios de vino de consagrar estaban “graves” para cubrir las misas.
Ante dicha situación, los párrocos pedían en las misas que los asistentes dejaran como ofrendas el vino, y el mismo, debía ser “lo más puro posible, sin aditivos, ni endulzados y tampoco espumantes”.
Datos oficiales
A pesar de que algunos templos manifestaron las posibles fallas, la Conferencia Episcopal de Venezuela precisó, en rueda de prensa, que “por los momentos, la situación está controlada en el país”.
Domingo 6/4/2014