Stefany Izquiel | [email protected]
En el barrio El Carpintero de Petare, Gustavo Alexander Ávila Córdoba, de 31 años de edad, fue asesinado por funcionarios pertenecientes a la Policía Nacional Bolivariana (PNB), frente a su esposa y su hijo. El hecho fue el jueves a las 6:00 am.
Ese día Gustavo se encontraba en su vivienda junto a su familia, donde también viven sus padres y su hermano menor, cuando una comisión de la PNB llegó a la zona en el marco de un operativo realizado para localizar a un supuesto delincuente.
“Ellos tocaron la puerta y la esposa de mi hijo les abrió. Entraron a la casa y nos sacaron a todos excepto a mi hijo y a su esposa, quien tenía cargado a mi nieto de 10 días de nacido”, contó Gustavo Ávila, padre del fallecido.
Los oficiales ordenaron a los padres de Ávila y a su hermano que siguieran una patrulla policial, la cual los guiaría hasta el módulo de la PNB ubicado en El Llanito, donde estuvieron varias horas retenidos, pues ellos tenían que “resolver unos asuntos” con su hijo.
En la vivienda, los uniformados le propinaron un disparo en el pecho a “quema ropa” a Gustavo frente a su esposa e hijo. Según César Ávila, tío del difunto, “luego de que lo hirieron, lo envolvieron en una sábana y lo tiraron en la parte de atrás de una patrulla. Después, lo trasladaron hasta El Llanito, pero ya se había muerto. Los policías ahora son unos criminales uniformados que matan a una persona inocente”.
Los efectivos afirmaron frente a la viuda del hombre, haberse equivocado de casa, pues allí no vivía el criminal a quien ellos buscaban, informó César Ávila.
“El homicida de mi sobrino fue un policía de nombre Jhan, ya nos informó un amigo”, dijo el tío. Los parientes de Gustavo denunciaron que los pnb hicieron destrozos, se robaron comida, electrodomésticos, artículos de bebé y una alta suma de dinero en efectivo.
2017-10-20