Nayzai Saavedra [email protected]
En redes sociales como Facebook y páginas de comercio web estilo Mercado Libre se puede observar cómo la venta de cabello, tanto cortes completos como el grueso para la aplicación de extensiones, está siendo una oferta común.
Pero más allá del hecho de que este cabello está siendo vendido para procedimientos de belleza en peluquerías del país, este “producto” está siendo comercializado fuera de Venezuela, como en el vecino país.
De “corte” internacional. Se conoció que desde el mes de septiembre mujeres y hombres a los que se les conoce como los “arrastradores” hacen la propuesta a las venezolanas en el puente fronterizo entre San Antonio y La Parada. Un diario regional relató que se forman largas filas en las que incluso se puede durar hasta una hora para concretar la transacción, que además se cotiza en pesos y que al hacer el cambio resulta más valioso de lo que sería la venta en Venezuela.
Lo que se pide. En el país la venta tampoco ha mermado, en Facebook se pueden encontrar diversos grupos creados especialmente para la venta de cabello procesado como extensiones o no. Los precios varían dependiendo de las características del mechón vendido, se pueden encontrar lisos o con tratamientos capilares, rizos y teñidos hasta en los llamados colores “fantasía” como lo son el morado, el rosa, entre otros.
Mientras más largo mayor es el costo, sobre todo si cuenta con la característica de ser 100% natural -principalmente por su cualidad de ser teñidos- y virgen, sin tinturas, porque suelen ser más saludables.
Por ejemplo, cinco mechones rizos -a pesar de estar teñidos- pueden llegar a ofertarse hasta en Bs 80 mil, aunque la vendedora indica en su propuesta que el precio puede ser “negociable”.
Lo mismo sucede en Mercado Libre, en donde se pueden encontrar desde los arreglos más profesionales, es decir, se observa que ha sido “pre-tratado” por una peluquería antes de la venta, hasta ofertas particulares de mujeres que al cortárselo en una peluquería piden a la profesional que le entregue el cabello sobrante o que se “trasquilan” ellas mismas.
Por otra parte, las “vendedoras” ofrecen el cabello ya cortado, amarrado en una colita, o aún sin cortar para que las personas puedan hacerse una idea de cómo se vería.
Incluso se pueden ver imágenes de largas melenas de niñas cuyos familiares aprovechan para hacer un dinerito extra.
En esta página web los precios son variados, por lo que los interesados tienen diversidad de opciones antes de pujar por alguna. Así como hay propuestas “al mayor” que pueden resultar bastante costosas -una cortina completa que mide 1 metro 20 cm de ancho por 24 pulgadas (60 cm) de largo se cotiza en Bs 470 mil, también hay otras como colas de caballo de hasta 39 cm a precios módicos como Bs 600.