Un estudio de la Universidad de Barcelona en España (UB) alertó de las elevadas concentraciones de microplásticos que ponen en riesgo las costas de todo el mundo.
El grupo de investigadores demostró concentraciones elevadas de microplásticos en las lagunas costeras de todo el planeta, inéditas a tiempos pasados.
Asimismo, alertaron de los nefastos efectos que tienen estos niveles de contaminación sobre el ecosistema acuático.
Según el estudio publicado por la revista ‘Environmental Pollution’, las lagunas costeras más afectadas son Lagos (Nigeria), Sakumo (Ghana) y Bizerta (Túnez).
Todas están cerca de grandes núcleos urbanos y sin sistemas de tratamiento de la basura, ni de las aguas residuales.
Las concentraciones más elevadas de estas micropartículas se detectaron en Barnes Sound y en otras lagunas pequeñas de Florida (Estados Unidos).
Esto podría ser por los distintos huracanes que transportan los microplásticos desde áreas contaminadas.
Estos microplásticos se expresan en abundancia de fibras y fragmentos de polietileno, poliéster y polipropileno.
El estudio también revisó los efectos de la contaminación sobre 96 especies distintas.
"Los elevados niveles de contaminación por microplásticos se dan por factores como el tiempo de permanencia y la tasa de renovación del agua, el desarrollo de espacios urbanos e industriales con una gestión inadecuada de los residuos, las descargas de ríos y emisarios, los cambios estacionales, los fenómenos naturales y la tipología de los microplásticos", afirma el investigador y primer autor del artículo Ostin Garcés-Ordóñez.
Los microplásticos son difíciles de biodegradar
Uno de los mayores problemas de estos residuos contaminantes, es su capacidad para durar largos periodos de tiempo antes de biodegradarse.
Esto influye también por las tasas lentas de renovación del agua cuando presentan procesos de contaminación.
Un ejemplo es la Laguna Mosquito, ubicada en Florida, Estados Unidos.
En ese lugar, la renovación del 50% de agua, requiere entre 200 y 300 días, prácticamente casi un año.
También los microplásticos pueden ir a parar al mar y agravar aún más el problema de la contaminación de los océanos.
"Los distintos elementos ambientales de las lagunas costeras son receptores de microplásticos y están afectados por la contaminación", puntualizó Canals.
"Aplicar de forma extensiva tanto las metodologías sencillas como las más avanzadas permitirá responder a muchos interrogantes sobre la dinámica de los microplásticos en estos ambientes o el rol de las lagunas como vertederos temporales o permanentes de microplásticos", remarcó Garcés-Ordóñez.
Fuente: Agencia EFE
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