EFE
Un joven chino de 29 años descubrió una estatuilla de terracota de la dinastía Song (960-1279) de manera accidental, en la cuneta de una carretera del centro del país asiático, informó hoy el diario local Chengdu Business Daily.
El arqueólogo por accidente, llamado Xu Yuanguang, paró su motocicleta junto a un montículo en las afueras de la ciudad de Chengdu, con el fin de hacer aguas menores, y éstas retiraron parte de la tierra que cubría la figurilla, una representación de una mujer arrodillada.
Xu vio el objeto, de unos 10 centímetros de altura, y decidió desenterrarlo, limpiarlo y llevárselo a casa, donde se puso en contacto con autoridades locales, y éstas llegaron a la conclusión, tras los estudios pertinentes, de que la estatua tenía alrededor de un milenio de antigüedad.
El arqueólogo Li Tiechui, del Centro de Investigación de Cerámica de Sichuan (provincia de la que es capital Chengdu), opinó que el lugar del hallazgo podría ser una tumba, ya que en la dinastía Song, que marcó una de las épocas de mayor refinamiento artístico de China, mucha gente era enterrada junto a dos estatuillas, una masculina y otra femenina.
La noticia ha llamado la atención en China en un momento en el que la mala costumbre de orinar en público ha generado cierto debate, a raíz de que un turista chino protagonizara un sonado enfrentamiento al visitar Hong Kong y permitir que su hijo pequeño hiciera sus necesidades en la acera de una céntrica calle.
Habitantes de Hong Kong, que tras más de un siglo de separación de China suelen tener una mentalidad diferente a sus vecinos de China, se quejan a menudo de los modales de los turistas chinos que los visitan, lo que ha desencadenado enfrentamientos entre visitantes y anfitriones en varias ocasiones en los últimos meses. EFE