2001.com.ve | Con información de RT
Unas 250.000 hormigas le salvaron la vida a una mujer estadounidense se lanzó desde 4.500 metros de altura. El 25 de septiembre de 1999, Joan Murra, realizó un salto en caída libre, es decir, no debía desplegar el paracaídas hasta llegar al límite en que podía abrirse, pero al alcanzar una velocidad de 130 km, se dio cuenta del algo no estaba bien con su equipaje: el paracaídas no se abría.
Los constantes giros que realizaba en el aire no permitían que el paracaídas se abriera, por lo que tuvo un aterrizaje muy violento, sobre un nido de hormigas. Como era de esperarse, la mujer estuvo al borde de la muerte, pero fue cuando las hormigas la salvaron: la mujer fue atacada por más de 200 picaduras, las cuales le inyectaron un veneno que derivó una descarga de adrenalina que le mantuvo el corazón latiendo.
Esto fue comprobado por médicos que llegaron al lugar del accidente y la trasladaron a un hospital. A pesar de todo, la experiencia no amedrentó a la mujer, pues dos años después, volvió a subirse a un avión y a saltar.
2018-03-12