The Detroit Motor Show, la Feria de Autos de Detroit, es la primera exposición internacional de vehículos del año y permite a los fabricantes tener la primera oportunidad de mostrar sus úlitmos modelos.
El Ford GT fue uno de los autos que más llamó la atención y marca el regreso de Ford a la legendaria carrera de Le Mans, 50 años después de su histórico triunfo.
Pero Ford no fue el único fabricante en traer coches de alto cilindraje: Acura expuso su NSX superauto que cuesta US$150.000, con el que celebra el 25 aniversario de su debut en las carreras.
La automotriz italiana Alfa Romeo no se quedó atrás con su 4C Spider e hizo gala de su tradición en la industria y su historia en las competencias exponiendo un 1932 Gran Premio Tipo B. La empresa recientemente regresó al mercado estadounindense.
Los fabricantes de autos han sentido el beneficio del aumento de ventas en Estados Unidos.
Sin embargo, aunque han demostrado su entusiasmo por experimentar con los diseños, al parecer hay un color favorito en la sala de exposición.
Rojo, sin duda, es la moda./Con información de BBC MUNDO
2015-01-16
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