El Tribunal de Primera Instancia de Nuakchot anuló el matrimonio de una niña de 13 años con un hombre de 50 años con problemas mentales, gracias a la presión ejercida por la Asociación de Mujeres Jefes de Familia (ASCF, siglas en francés) de Mauritania.
La presidenta de ASCF, Aminetou Mint Moctar, dijo hoy a Efe que los padres de la niña, Raya Mint Abdelghader, ofrecieron a su hija a principios de 2013 en matrimonio a quien hasta ahora era el esposo de las joven a cambio de 200.000 uguiyas (unos 500 euros).
La ONG mauritana lleva a cabo un programa de lucha contra el matrimonio de menores, añadió que los padres ya habían casado en el pasado a su hija de nueve años con otro adulto pero, sin dar más detalles, la asociación comentó que se divorciaron tiempo después.
En Mauritania, el Código de Estatuto Personal fija la edad de matrimonio en 18 años, pero deja una derogación que permite a una mujer casarse a partir de 16 años en casos excepcionales.
Sin embargo, desde el punto de vista religioso nada impide a los tutores de una mujer casarla independientemente de su edad.
"El islam no fija una edad para el matrimonio de la mujer" dijo a Efe Hamedine Uld Salek, miembro de la Asociación de ulemas de Mauritania y también imán de la mezquita más antigua de Nuakchot.
Uld Salek matizó que el matrimonio con una menor "está estrictamente prohibido" si los médicos advierten peligros (como el embarazo precoz) en la salud de la niña.
La presidenta de AFCF asegura que "en un país donde casi toda la población practica un islam conservador, la prohibición del matrimonio de menores parece difícil de alcanzar".
En 2012, la Justicia mauritana se enfrentó a nueve casos de menores casadas con hombres mayores de edad, pero solo anuló el enlace de dos niñas cuyos esposos tenían más de 80 años.
Según las estadísticas de la ONG, en 2012 alrededor de 500 menores de entre 9 y 16 años contrajeron matrimonio y en 2013 la cifra aumentó un 54 %.
Las causas por la que los padres casan a las niñas suelen ser principalmente la pobreza y si la joven se quedad embarazada tras una violación ya que esto supone socialmente "un deshonor de por vida".
Por último, la ONG apunta que en 2012 se registraron 4.732 casos de violaciones sexuales, sin contar los casos de mujeres que no denuncian estas agresiones a la policía para no ser acusadas de consentimiento de relación extramatrimonial o difamación. EFE