A Jesús Penella (JP) y a Luis Rojas (LR) siempre se les encuentra por los predios de Las Cuevas del Indio, en La Guairita. Para ellos, como para muchos otros aficionados, pasar todos los fines de semana en este imponente sitio turístico es una verdadera pasión. Tuvimos la oportunidad de entrevistarlos y expresaron, desde un principio, que tratan de escalar lo más que pueden.
Ciertamente, Las Cuevas del Indio es un excelente lugar, lleno de montañas y rocas, para practicar el deporte de la escalada. Y Jesús y Luis no faltan a su cita con las montañas, a no ser que se encuentren de excursión en alguna otra parte de Venezuela. Su más reciente viaje fue a Las Puertas de Miraflores (Estado Monagas), donde traspasaron los límites del ascenso en montañas de fuerte pendiente.
MC. ¿Cuánto tiempo tienen realizando este deporte?
JP. Desde el 2008. Normalmente, con el mismo grupo de gente con el que aprendí.
LR. Yo empecé hace varios años y lo he descuidado en ciertas épocas, pero yo diría que un total de 6 años.
MC. Se han encontrado en la búsqueda de mejores montañas y mejores rutas, ¿a qué partes de Venezuela han ido con el objetivo de escalar?
JP. Hace poco fuimos a Monagas, al Santuario y a las Puertas de Miraflores. También hemos ido a San Juan de Los Morros; allá se practica bastante el deporte, tienen unas paredes artificiales y también los morros, como tal.
MC. ¿Qué sientes al llegar a la cima de una cumbre?
JP. Bueno, en este caso, no se habla como tal de llegar a la cima, eso se usa más con excursionismo. Aquí, más que todo, se habla de hacer la ruta, de que llegaste a la reunión, o la encadenaste. Cuando haces la ruta, una sola vez y sin caerte, es lo mejor que puedes lograr hacer. A veces, se logra a la primera, pero siempre da más satisfacción cuando la has trabajado, que te has caído y dado pegues, hasta que te sabes los pasos de memoria y ya te sale perfecta.
MC. ¿Alguna anécdota interesante que les haya sucedido mientras realizan este deporte?
JO. Más que interesante, lo que más me gusta del deporte es conocer sitios nuevos. Por ejemplo, en Guárico dormimos en la pista de aterrizaje de los aviones de los paracaidistas. Escalar y ver cómo la gente se lanzaba en paracaídas al lado tuyo fue bastante interesante.
LR. En el último viaje con Diego Molina, estábamos montando una reunión y nos cayó un enjambre de abejas, me picaron tres y yo soy alérgico. Tuvimos que quitar todo y me hinché muchísimo.
MC. ¿Dónde aprendieron las bases para ser unos buenos escaladores?
JP. Comencé por el Campamento La Llanada, ahí me enseñaron lo que son las bases del manejo de cuerdas, que es lo que necesitas para la parte de seguridad. Después, escalar, como tal. Empecé a venir con el que fue nuestro instructor de la época, Gabriel Puma y él nos enseñó todas las bases de seguridad y los protocolos. De ahí en adelante, uno mismo tiene que venir y entrenar, comprarse sus propios equipos y motivarse.
LR. Yo antes hacía montañismo y para poder hacer alta montaña, necesitas saber un poco de escalada y me gustó un poco más la escalada en roca. Ahora lo práctico.
MC. ¿Practican algún otro deporte que los ayude a perfeccionarse en este?
JP. La escalada se practica y se entrena solamente escalando. Algunos decimos que la escalada es un deporte muy ingrato, porque, si lo dejas de hacer, se te olvida, los músculos vuelven a cero. Sí practico otros deportes, no de manera tan formal. Me gusta bastante el kayak, aunque sea muy difícil de practicar. También hago bodyboard de vez en cuando, pero no soy un surfista apasionado, para nada.
LR. Practicar ejercicios cardiovasculares siempre ayuda, pero la mejor manera de perfeccionar la escalada, es escalando.
MC. Una filosofía de vida.
JP. La filosofía de la garza: siempre calmado.
MC. ¿Nunca has sentido la sensación de vértigo?
JP. Claro, si no la sintiese, fuese chimbísimo. Ese es todo el punto, sentir el vértigo y caer en pánico y todas esas cosas.
MC. Háblanos un poco de los nombres de las rutas.
JP. Yo soy malísimo para los nombres, jamás me los he aprendido. Quien la hace y equipa, es decir, colocarle las chapas, es quien le da el nombre como tal. Existen rutas con nombres bastante cómicos como “La Invasión de las Motos Chinas”, “La Emancipación del Hombre Rana”, “Mujer Pública”, “La Secretaria”, “Panadería y Pastelería”, “Nutella, Ovomaltina y Nucita”.
MC. ¿Existen varios tipos de escalada?
LR. Hay dos tipos de escalada: la escalada deportiva y la escalada clásica. La escalada clásica, es, básicamente, cuando te encuentras una pared virgen, que para subirla tienes que ir colocando los seguros que te van a ayudar. En cambio, la escalada deportiva está hecha en paredes donde no se pueden colocar seguros. Entonces, colocan chapas, que te ayudan a subir y ahí colocas tu seguro con una cinta exprés. Lo que se escala en deportiva, tiende a ser mucho más alto que lo que escalas en clásico.
MC. ¿Qué les recomiendas a los jóvenes que desean realizar esta actividad en Venezuela?
LR. Que busquen a una persona que sepa escalar, ya que es un deporte de riesgo controlado. Si lo haces bien, no hay problema alguno. Pero si lo haces mal, te estás arriesgando a que te pase algo. Hay cursos y lugares que te enseñan a desarrollarte en este deporte.