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Este domingo 26 de enero se llevará a cabo la 89° entrega de los Premios Óscar en el Dolby Teatre, y para no perder la costumbre de generar algún tipo de controversia que luego se convierta en anécdotas, en la alfombra roja se hizo sentir el malestar por las políticas del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Esta vez algunos actores como en el caso de Ruth Negga, quien está nominada a la categoría Mejor Actriz por su interpretación de Mildred Loving en "Loving" y de Lin-Manuel Miranda, nominado a Mejor canción original por «How Far I’ll Go» de Moana, decidieron usar un lazo prendido en su pecho en apoyo a esta causa. Corresponde a una iniciativa de la Asociación Americana de Libertades Civiles.
Animada por el comediante norteamericano Jimmy Kimmel, la ceremonia estuvo llena de chistes y comentarios dirigidos al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, uno de los momentos más relevantes en este sentido fue la ovación que recibió Meryl Streep por su discurso dado en los Globos de Oro.
Kimmel haciendo referencia a las palabras de Trump, pidió de forma sarcástica "un no merecido aplauso" a "una actriz sobrevalorada" mencionando la carrera de Streep, quien ha actuado en más de 50 películas "sin brillo".
La cosa no se quedó allí, pues hubo un galardonado que no asistió a la entrega de los premios, el caso de el director iraní, Asghar Farhadi quien ganó por Mejor Película Extranjera y no asistió a la premiación en señal de protesta.
"Mi ausencia es por respeto a la gente de mi país y la gente de otras seis naciones a las que se les falta el respeto no dejándolos entrar a Estados Unidos", leyó una enviada en el comunicado.
Kimmel volvió a hacerlo, pues proyectó la patntalla de su teléfono en una pantalla gigante donde emitía dos tuits a Trump, manifestándose preocupado ante el silencio del presidente ante las críticas que llí se estaban emitiendo hacia su persona.