La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, adelantó hoy que después de abandonar su cargo escribirá unas memorias y dedicará esfuerzos a impulsar el papel de la mujer en la política, aunque no habló de sus propias ambiciones en ese terreno.
Cuatro días antes de ceder a John Kerry la dirección de la diplomacia estadounidense, Clinton habló de su legado y sus proyectos en una conferencia vía satélite con jóvenes de todo el mundo.
Preguntada por si se presentará como candidata demócratas a las elecciones primarias de 2016 en EE.UU., Clinton aseguró que no está "pensando en nada parecido a eso ahora mismo".
"Lo que sí quiero es ver a más mujeres competir por las posiciones más altas en sus países. Y haré lo que pueda para eso, tanto si se refiere a mi propio futuro como no. Por ahora, no estoy inclinada a decidir sobre eso (mi futuro)", indicó.
"Pero haré todo lo que pueda para asegurarme de que las mujeres compiten a los más altos niveles no sólo en Estados Unidos, sino en todo el mundo", añadió.
Clinton consideró que sigue habiendo un "doble estándar" para las mujeres que deciden entrar en política, que quedan "encasilladas y estereotipadas".
"Ésta ha sido la causa de mi vida, y lo seguirá siendo cuando abandone la oficina de secretaria de Estado, porque nos estamos haciendo daño con este asunto", afirmó.
"Cuando pones barreras en el camino de la mitad de la población, estás poniendo de hecho frenos en tu propio desarrollo como país", agregó.
Una vez que abandone el Departamento de Estado este viernes, Clinton planea "recuperar unos 20 años de sueño perdido", según bromeó, aunque también escribirá un nuevo libro sobre su tiempo como titular de Exteriores.
"Sí, escribiré unas memorias. Aún no sé lo que diré en ellas, pero tendré la oportunidad de entrar en profundidad en muchos asuntos", apuntó.
En la entrevista global, Clinton reconoció que lo que más lamenta de su periodo en la diplomacia es la muerte de cuatro estadounidenses en el atentado del pasado 11 de septiembre en Bengasi (Libia).
También reveló su secretario de Estado de EE.UU. más admirado, William Seward, que fue el jefe de diplomacia durante el mandato de Abraham Lincoln y después de su muerte, entre 1861 y 1869.
"Era un político muy exitoso de Nueva York, y antes de convertirse en secretario de Estado había competido contra el presidente Lincoln (en las primarias)", dijo Clinton, que subrayó el "paralelismo" con su historia y la del presidente Barack Obama.
Pese a esa rivalidad, Seward "se mantuvo siempre al lado de Lincoln, asesorándole constantemente, y marcó una diferencia en la Guerra Civil", señaló. EFE