El grupo político que impulsa una campaña para revocar el mandato del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, anunció hoy que completó la cantidad mínima de firmas para iniciar el proceso, aunque afirmó que seguirá recolectando autógrafos para tener más respaldo.
El movimiento es encabezado por el concejal de Bogotá, Miguel Gómez, del Partido Social de Unidad Nacional, quien hace varias semanas inició la campaña en medio de las críticas que ha recibido la administración izquierdista de Petro por el manejo de las basuras.
Gómez, que defiende las ideas del ex presidente Álvaro Uribe (2002-2010), dijo que ya se recogieron 299.553 firmas. La cantidad mínima debe ser de 289.263, equivalente al 40 por ciento de la votación que obtuvo Petro en las elecciones municipales de octubre de 2011.
El político dijo que las firmas se recogieron en tan solo un mes y medio, lo que, en su opinión, demuestra que la ciudadanía está "aburrida" con el gobierno de la capital.
Además del tema de las basuras, el gobierno de Petro ha recibido críticas por la cantidad de dinero que deben pagar los propietarios de bienes raíces en las zonas de la ciudad donde se han construido diversas obras de infraestructura.
El movimiento que lidera Gómez debe entregar la documentación a la Registraduría Nacional del Estado Civil, la entidad encargada de expedir los documentos de identificación y de organizar las elecciones, que debe verificar la autenticidad de las firmas.
Acto seguido, el organismo tendrá un plazo de dos meses para preparar la votación en la que los ciudadanos deben decir si se revoca o no el mandato de Petro, cuyo período va del 1 de enero de 2012 hasta la misma fecha de 2016.
En dicha votación debe participar como mínimo el 55 por ciento de quienes sufragaron en las elecciones municipales en Bogotá, es decir, alrededor de 1,2 millones de personas. De esa cantidad la mitad más uno debe apoyar la revocatoria para que el alcalde tenga que dar un paso al costado.
Petro, que fue miembro del otrora grupo guerrillero Movimiento 19 de Abril (M-19), que se desmovilizó en 1990, así como candidato presidencial en las elecciones de 2010, asegura que el movimiento por la revocatoria es liderado por políticos y empresarios que en anteriores administraciones municipales se han beneficiado de contratos./DPA