El jefe de un frente de la guerrilla de las FARC, conocido con el alias de "Jacobo Durango", está entre los cinco muertos que dejó un bombardeo ejecutado este jueves por la Fuerza Aérea en el norte de Colombia, se informó hoy oficialmente.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, había revelado la víspera que los cinco guerrilleros murieron en un ataque militar registrado en una zona montañosa del norteño departamento de Córdoba, en jurisdicción del municipio de Tierralta.
Pinzón confirmó hoy que el cadáver del guerrillero, que fungía de jefe del quinto frente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), fue identificado por expertos forenses.
El líder de las FARC, cuyo nombre verdadero era Luis Carlos Durango, era miembro de ese grupo desde hacía 34 años y su centro de actividades comprendía una extensa zona del norte del país.
"Este individuo es un terrorista de 34 años en las FARC, responsable de masacres tristemente célebres en la zona de Urabá, en particular contra el movimiento Esperanza, Paz y Libertad en la década de los 90″, dijo Pinzón.
Dicho movimiento político, prácticamente extinguido, fue formado por ex integrantes del Ejército Popular de Liberación (EPL), un grupo guerrillero creado en los años 60 y que se desmovilizó tras firmar un acuerdo de paz con el gobierno en los 90.
Las FARC cometieron ataques contra los ex guerrilleros en el noroeste del país, con el argumento de que su desmovilización era una traición.
Según Pinzón, Durango era muy cercano a Luciano Marín, alias "Iván Márquez", el jefe del equipo negociador de las FARC en el proceso de paz que ese grupo protagoniza con el gobierno colombiano en Cuba.
El ministro comentó que la muerte de Durango y de los otros cuatro guerrilleros del quinto frente de las FARC "es un gran golpe estratégico para el bien de esa región".
El comandante de la Fuerza Aérea, general Tito Pinilla, dijo que aviones de combate bombardearon el campamento guerrillero y luego comandos de élite del Ejército lo ocuparon.
El gobierno ofrecía una recompensa de 400 millones de pesos (unos 225.000 dólares) por informaciones que permitieran capturar a Durango.
De acuerdo con el comandante de las Fuerzas Militares, general Alejandro Navas, el quinto frente de las FARC quedó desmantelado por completo con el golpe asestado el jueves y la muerte de otros 14 miembros de esa célula en diciembre.