La multinacional española Gas Natural Fenosa (antes Unión Fenosa) vendió a privados el servicio de distribución de electricidad en Nicaragua que manejaba desde el año 2000, reveló este martes el asesor económico presidencial, Bayardo Arce.
En declaraciones a periodistas, Arce afirmó desconocer quién o quiénes compraron el 84 por ciento de las acciones que Fenosa poseía (el 16 por ciento pertenece al Estado de Nicaragua) pero aseguró que se trató de "un negocio entre privados".
"Yo entiendo que ellos decidieron venderle todo el negocio a otra empresa, hablen con ellos porque es un negocio entre privados", dijo el asesor del presidente Daniel Ortega para asuntos económicos.
Voceros de la Gas Natural no han confirmado ni desmentido hasta ahora la información divulgada por Bayardo Arce.
"No sé qué pactaron entre ellos, no sé en cuánto la vendieron, yo no soy vocero de Gas Natural", afirmó Arce y aseguró que el Estado "sigue teniendo su participación" en la filial nicaragüense conocida como Disnorte-Dissur.
Tampoco reveló el motivo de la venta, aunque muchas veces los directivos de Fenosa se quejaron de afrontar pérdidas de 50 millones de dólares anuales, atribuidas a fallas técnicas en la red y fraude (conexiones ilegales).
Arce dijo que en adelante los nuevos dueños de Gas Natural Fenosa deberán ofrecer "un servicio de mejor calidad a la población" y compensar las pérdidas técnicas con inversiones en el sector.
La antigua Unión Fenosa compró en 2000 el servicio de distribución eléctrica en Nicaragua, un país con apenas 600.000 usuarios legales y cientos de miles conectados de forma ilegalmente en barrios marginales de Managua y del interior del país.
En febrero de 2012, la multinacional española cedió al gobierno nicaragüense 16 por ciento de las acciones de Disnorte-Disur, como pago de una deuda por 11,5 millones de dólares, y un asiento en el consejo de administración de su filial en Managua. /DPA
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