Las autoridades alemanas confían en aclarar la propiedad de 590 cuadros de los más de 1.400 hallados en una vivienda de Múnich con su difusión en internet, mientras buscan la colaboración del inquilino del piso para acelerar su restitución si se comprueba que es arte expoliado por los nazis.
El ministro de Justicia de Baviera, Winfried Bausback, expresó hoy su confianza en lograr una "solución consensuada" con Cornelius Gurlitt, de 80 años e hijo de un marchante que trabajó por encargo del régimen nazi, en cuya vivienda se hallaron las piezas el año pasado.
Está en juego la "responsabilidad de la República Federal de Alemania en la investigación de los crímenes del nacionalsocialismo", indicó Bausback en declaraciones al diario "Süddeutsche Zeitung", ya que se sospecha que buena parte de ese tesoro oculto fueron obras expoliadas a judíos por el Tercer Reich.
Las obras fueron confiscadas por la fiscalía de Augsburgo (sur del país) tras registrarse la vivienda de Gurlitt en 2012, pero el caso no salió a la luz hasta hace dos semanas, a raíz de unas revelaciones en la prensa.
Desde entonces apenas se difundió en internet una primera partida de 25 cuadros, en medio de un alud de críticas y presiones de la comunidad judía al proceder de la Justicia alemana.
El gobierno de Angela Merkel ha rechazado repetidamente las críticas, en lo que compete a su papel en el caso, y el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert, reiteró hoy que la competencia directa del asunto corresponde a la fiscalía de Augsburgo.
Para la próxima semana se ha anunciado la difusión paulatina de otras 590 obras en el portal de internet www.lostart.de, con el objetivo de acelerar la localización de sus legítimos propietarios.
En la primera partida de 25 cuadros se encontraban obras de Otto Dix, Marc Chagall, Henri Matisse, Antonio Canaletto, Eugène Delacroix y Max Liebermann, entre otros.
En el conjunto de 1.400 piezas halladas en la vivienda hay también cuadros de artistas como Picasso, Kirchner y otros autores calificados por el nazismo de representantes del "arte degenerado", aunque también hay obras de siglos anteriores. EFE