Más de un millar de personas fueron evacuadas en cinco provincias argentinas a causa de las intensas lluvias caídas en los últimos días, que obligaron al cierre de escuelas y la paralización del transporte en algunas localidades.
Unas 1.000 personas fueron evacuadas en la provincia sureña de Neuquén por un temporal que se prolonga desde hace cuatro días y es considerado el peor de los últimos cuarenta años. El ministro de Seguridad de Neuquén, Gabriel Gastaminza, afirmó el lunes a medios de prensa que en la capital provincial está el mayor número de evacuados, los cuales son más 500.
Las autoridades decidieron suspender las clases y el transporte público y declarar el asueto administrativo municipal en varias localidades del este provincial a causa de los anegamientos de calles y carreteras. En tanto grandes supermercados también decidieron cerrar sus puertas en la capital provincial.
El Comité de Emergencia de la provincia patagónica pidió a la población de las localidades afectadas que permanezca en sus hogares. Hasta el momento han caído unos 200 milímetros de lluvias, cuando lo normal durante todo el año para la zona afectada es de 140 a 160 milímetros.
En la limítrofe provincia de Río Negro las autoridades suspendieron las clases en gran parte de la provincia. Las precipitaciones anegaron zonas de las localidades de Cipolletti y General Roca, donde varias familias decidieron abandonar sus viviendas, señalaron medios de prensa.
En tanto, más de 200 personas fueron evacuadas en el centro y sur de Santa Fe, en el este de Argentina, a causa de las fuertes tormentas que provocaron el corte de rutas nacionales. En la cercana provincia de Córdoba, en el centro geográfico del país, hay unos 80 evacuados en dos localidades.
Por otro lado, unas 30 familias fueron evacuadas en el Valle de Uco, en Mendoza, en el oeste argentino. El director de Defensa Civil del departamento mendocino de Tupungato, Roberto Abogrado, dijo a la prensa que desde el domingo "no ha parado de llover" y se produjeron inundaciones que provocaron la caída de paredes y techos en casas precarias.
En otras ciudades como Buenos Aires las lluvias han causado trastornos en el tráfico. Las precipitaciones seguirían hasta el martes en parte del país, según el Servicio Meteorológico Nacional.
AP