El Gobierno australiano anunció hoy que aumentará un 12,5 por ciento el impuesto sobre el tabaco cada año hasta 2016 con lo que espera recaudar unos 4.747 millones de dólares (3.567 millones de euros).
El jefe del Tesoro, Chris Bowen, dijo que el aumento ayudará a subsanar el déficit presupuestario y a combatir el tabaquismo, que causa la muerte de unas 15.000 personas cada año en el país oceánico.
"Hemos analizado todos los aspectos como el hecho de que la última vez que se aumentó el impuesto al tabaco su consumo se redujo en un once por ciento", dijo Bowen a la cadena ABC.
El Tesorero añadió que la medida ayudará a reducir la tasa de mortalidad entre los australianos con las rentas más bajas.
El plan entrará en vigor el próximo 1 de diciembre con un primer aumento del 12,5 por ciento y seguirá con otros aumentos equivalentes el 1 de setiembre de 2014, de 2015 y de 2016.
Un paquete de 20 cigarrillos en Australia cuesta alrededor de los 16 dólares (12,12 euros) y tras el aumento impositivo dentro de cuatro años costará unos 4,48 dólares (3,37 euros) más.
El primer ministro australiano, Kevin Rudd, elevó el impuesto al tabaco en 2010, durante su anterior gestión.
Por su lado, el portavoz de "British American Tobacco", Scott McIntyre, dijo que el aumento empujará a los consumidores a buscar opciones más baratas como los cigarrillos de bajo precio o los que se venden en el mercado negro.
Australia, que ha emprendido en los últimos años una agresiva campaña contra el tabaquismo, se convirtió en 2012 en el primer país del mundo en comercializar los paquetes de tabaco bajo una cajetilla sin publicidad ni logotipo de la compañía.
Los paquetes de cigarrillos eran el último soporte publicitario que tenían las tabaqueras en Australia, país que prohibió los anuncios de este producto en televisión y radio en 1976, en los periódicos en 1989 y el patrocinio de eventos en 1992. EFE