La comunidad médica española se apuntó una victoria después de que un tribunal ordenara que el gobierno de la región de Valencia indemnice a los médicos con hasta 49.000 euros (56.000 dólares) por haber tenido que trabajar sin trajes de protección personal durante los devastadores primeros meses de la pandemia.
La demanda, presentada por un sindicato de médicos, es la primera de su tipo que es ganada en España. Cuyo sistema de salud quedó casi abrumado por la primera ola del COVID-19.
“Es una sentencia pionera en España”, declaró el miércoles en entrevista telefónica con The Associated Press Víctor Pedrera, secretario general del sindicato de médicos de Valencia, la CESM-CV, la organización que presentó la demanda.
Pedrera, que es médico familiar, relató que contrajo el virus poco después de la pandemia llegó a España en marzo de 2020. Dijo que estuvo dos meses en su casa “bastante mal, porque yo no sabía qué se estaba haciendo para el tratamiento”.
El tribunal de la provincia oriental de Alicante falló el martes por la noche que la región de Valencia no protegió debidamente a sus médicos durante los primeros meses de la pandemia. El juez concluyó que la falta de trajes protectores puso en peligro a todos los trabajadores del sector salud. Especialmente a los médicos, pues tenían contacto directo con los enfermos.
El juez ordenó pagar compensaciones de entre 5.000 y 49.000 euros a los 153 médicos que participaron en la demanda.
Los médicos obligados a trabajar sin la protección debida pero que no se enfermaron ni tuvieron que aislarse recibirán 5.000 euros.
Los que sí tuvieron que aislarse recibirán 15.000 euros. Los que se enfermaron, pero no tuvieron que ser hospitalizados recibirán 35.000 euros y los que sí tuvieron que ser hospitalizados recibirán 49.000.
El gobierno de Valencia apelará el fallo. Pero el jefe regional, Ximo Puig, se disculpó con los trabajadores médicos y dijo que la pandemia fue “absolutamente sobrevenida”.
El fallo agregó que el departamento regional de salud incumplió con su deber de proteger a los médicos desde el momento en que tuvo conocimiento de la existencia del COVID-19. En particular, luego de la declaración del estado de emergencia nacional.
España, como muchos otros países, tuvo dificultades de dar mascarillas y trajes protectores a su personal médico durante los primeros meses de la pandemia. El gobierno nacional impuso una estricta orden de confinamiento colectivo durante varias semanas tras declarar un estado de emergencia en marzo de 2020.
El fallo se conoció en momentos en que el sistema nacional de salud nuevamente se ve puesto a prueba por una nueva oleada de contagios alimentada por la variante ómicron. Aunque las muertes han disminuido gracias a la alta tasa de vacunación del país.
Pedrera advirtió que habrá más demandas de otras asociaciones médicas en Valencia, e incluso de otras profesiones de toda España.
“Estoy seguro de que otros colectivos se animarán a presentar sus demandas. Será lo que abra la puerta”, afirmó Pedrera.
AP
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