Autoridades levantaron órdenes de evacuación en una franja amplia de terreno a las afueras de Colorado Springs el viernes mientras decían que una llovizna sorpresiva les ayudó a ampliar el control de un incendio forestal que ha destruido 400 casas.
Justo un día después de permitir el regreso a los residentes del barrio Flying Horse en el norte de Colorado Springs, funcionarios autorizaron el regreso de la gente a unas 1.000 casas. También reabrieron una franja al este en la cercana área de Black Forest en el condado de El Paso.
El comandante de incidente Rich Harvey dijo que el incendio de Black Forest —el más destructivo en la historia de Colorado— está ahora contenido en un 30%. El jueves sólo había sido contenido en un 5%.
El incendio, en el cual murieron dos personas al parecer al tratar de escapar de su casa, comenzó el martes durante condiciones de calor extremo y yerba seca. Funcionarios advirtieron que aún podría estallar nuevamente si cambia el clima húmedo.
Cuadrillas señalaron que estaban mejor preparadas para enfrentar las llamas debido a lecciones aprendidas al combatir el año pasado el incendio de Waldo Canyon, uno similarmente devastador que devoró cientos de casas y mató dos personas a sólo unos cuantos kilómetros de distancia.
Cuando comenzó a quemarse Black Forest, una región rural densamente boscosa al norte de Colorado Springs, las autoridades desalojaron velozmente a decenas de miles de personas de un área más grande que la zona metropolitana de Denver.
Inmediatamente comenzaron a contar casas destruidas para obtener información de los nerviosos propietarios. Y apresuraron la participación de tropas federales y ayuda aérea, evitando la burocracia que paralizó esos recursos hace un año mientras nubes de humo ondulaban sobre Colorado.
En el plazo de una hora, el condado de El Paso tenía establecido y en acción su centro de operaciones de emergencia y había solicitado ayuda a la cercana Base Peterson de la Fuerza Aérea. El legislador Doug Lamborn llamó al centro federal en Idaho que coordina el combate a incendios en el occidente del país para acelerar el proceso de autorización del uso de los aviones. El gobernador John Hickenlooper movilizó a la Guardia Nacional de Colorado, y las tropas comenzaron a ayudar a asegurar la rápidamente creciente zona de evacuación.
La causa del incendio está bajo investigación./AP