El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, pidió hoy al Consejo Nacional Electoral (CNE) que no lo exhorte a suspender el habitual informe sabatino, por los comicios municipales y provinciales de mañana y conminó a ese organismo a que, en todo caso, le ordene, si tiene capacidad legal para hacerlo.
Domingo Paredes, presidente del CNE, exhortó a Correa, a principios de semana, a suspender el informe del sábado, por la veda de la campaña electoral que rige desde la medianoche del jueves en el país.
Correa, sin embargo, emitió hoy el informe al considerar que no hay ninguna normativa que lo obligue a suspender el habitual programa de los sábados, donde dijo que no hará proselitismo.
El mandatario calificó como un "desliz" e innecesario el exhorto de Paredes que, además, dijo, ha dado pábulo para que los medios de comunicación contrarios a su gestión resuenen la aparente pugna con el CNE.
"Ojalá nunca más existan exhortos en nuestra democracia", añadió y dijo que si la normativa lo permite una función del Estado debe "ordenar" a otra, pero no exhortar, pues ello supone, según Correa, una interferencia.
"Exhorto a las demás funciones del Estado a no exhortarme" si "no hay capacidad para actuar" pues, entonces, "están interfiriendo en otras funciones", remarcó el mandatario y reiteró: "Si tienen capacidad legal ordenen, pero no exhorten".
También señaló que decidió ratificar su enlace sabatino debido a la supuesta serie de informaciones sesgadas que se ha emitido esta semana a través de varios medios de comunicación.
"Mientras haya esta clase de prensa libre e independiente, cada semana habrá enlace", ironizó Correa y aseguró que el CNE no ha reaccionado frente a las informaciones supuestamente sesgadas que ha publicado un sector de la prensa nacional.
Además, dijo que si se trata de aplicar la veda electoral en su plenitud, entonces ello "implicaría que no circulen medios de comunicación (…). Cuando no circulen los periódicos yo no hago sabatinas", apuntó.
Para demostrar sus argumentos, Correa presentó caricaturas y reportes periodísticos sobre las supuestas tergiversaciones de la prensa, además de mensajes en las redes sociales provenientes de opositores a su gestión.
Criticó textos en Twitter que convocaban para hoy a un cacerolazo durante el informe sabatino y lo comparó con las protestas que se han dado con esa modalidad en Argentina y Venezuela.
También mensajes emitidos el viernes por el presidente de la Cámara de Comercio de Quito, Blasco Peñaherrera, al que tildó de "fascista", con resultados de una encuesta de la empresa Market sobre las aparentes intenciones de voto para la alcaldía de la capital, que favorecían a un candidato opositor.
Eso es, para Correa, un "descarado rompimiento de la ley" y criticó que el CNE no se haya pronunciado sobre ello.
Unos 11,6 millones de ecuatorianos están convocados a los comicios de mañana, en los que se elegirán 221 alcaldes, 23 prefectos de las provincias, 867 concejales urbanos, 438 concejales rurales y 4.079 vocales de las juntas parroquiales. /EFE
