DPA
El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, y su homólogo ruso, Serguei Lavrov, propusieron hoy en París declarar un alto el fuego en determinadas regiones de Siria, poco antes de que se dé inicio a las conversaciones de paz entre gobierno y oposición en Ginebra.
El alto el fuego sería "localizado" y posiblemente regiría en ciudades como Alepo, dijo Kerry tras el encuentro, cuando faltan menos de diez días para el previsto inicio de las conversaciones de paz en Suiza.
A su vez, el ministro del Exterior sirio, Walid al Muallim, mantendrá conversaciones con Moscú el próximo viernes.
Rusia y Estados Unidos hablaron hoy también sobre la posibilidad de un intercambio de prisioneros entre el gobierno del presidente Bashar al Assad y la oposición.
"Es momento de que el pueblo sirio sea capaz de trazarse un futuro por sí mismo", dijo Kerry en una rueda de prensa conjunta con Lavrov y con el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe a Siria, Lakhdar Brahimi.
No obstante, queda por esperar la decisión de la oposición siria en lo que respecta a su participación en las conversaciones de paz. Se espera que la postura final quede delinieada tras el encuentro interno que se llevará adelante este viernes en Estambul.
De no anunciarse su participación en el encuentro, las conversaciones en Suiza podrían fracasar incluso antes de haberse iniciado. Tampoco se ha decidido aún cuál será la participación de Irán en el proceso.
En tanto, en el terreno local, las fuerzas rebeldes sufrieron un golpe de los terroristas del grupo Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), que mataron a decenas de rebeldes de la brigada Ahrar al Sham cuando huían de Al Rakka y reconquistaron aproximadamente la mitad de la provincia, informó hoy un activista.
Según la fuente, los rebeldes fueron asesinados en un puesto de control del ISIS en la provincia de Al Hassake. Además, los terroristas reconquistaron parte de la provincia de Al Rakka, de donde fueron expulsados la semana pasada.
Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, en el hospital nacional de Al Rakka se contaron 62 cadáveres de rebeldes de brigadas islamistas caídos en los últimos días en su lucha contra el ISIS.
La web "Akselser", crítica con el régimen, señaló que los terroristas del ISIS -sometido a las órdenes del terrorista iraquí Abu Bakr al Bagdadi e integrado por muchos yihadistas extranjeros- cercaron hoy la pequeña ciudad de Al Bab en la provincia de Alepo.
El domingo, 304 personas murieron, entre ellas 217 milicianos, soldados, terroristas y rebeldes, según la organización. Además, en el campamento de refugiados palestinos de Al Jarmuk, en Siria, aislado por las tropas del gobierno que no permiten la entrada de alimentos, otros dos hombres murieron de inanición el domingo.
Precisamente el primer ministro sirio, Wael al Halki, se reunió el domingo con el presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Peter Maurer, al que dijo que la situación de los civiles en los feudos rebeldes no es mala debido al asedio de las tropas del gobierno, sino a que los "terroristas" (opositores) utilizan a los civiles como "escudos humanos", informó hoy la agencia de noticias Sana.
Al Halki expuso a Maurer la difícil situación de los civiles en Nubl y Sahra, asediado por los rebeldes, donde viven seguidores del régimen de Bashar al Assad.
Antes, Maurer había pedido el acceso de la Cruz Roja a todos los territorios asediados y también a las prisiones. La oposición siria en el exilio puso como condición para su participación en las conversaciones de paz en Ginebra la liberación de presos políticos y la instalación de "corredores humanitarios".
Según fuentes de la oposición, el conflicto ya ha causado más de 130.000 muertos desde marzo de 2011, además de haber forzado a millones de personas a huir.