EFE
El papa Francisco ha recordado a los nuevos 19 cardenales que nombrará el próximo 22 de febrero que su designación "no significa una promoción, un honor o una condecoración".
En la carta que ha enviado a los nuevos purpurados y que fue difundida hoy por el Vaticano, Francisco afirma que ser elegido cardenal "simplemente es un servicio que exige ampliar la mirada y agrandar el corazón".
Para "mirar más lejos, amar más universalmente y con mayor intensidad", sugirió el pontífice argentino a los purpurados, "el camino es "postrándose, siendo humildes y convirtiéndose en servidores",
El papa Jorge Bergoglio pide a los purpurados que reciban así esta designación "con el corazón simple y humilde" y que se "alejen de cualquier expresión mundana o festejos que no sean los del espíritu evangélico, basados en la austeridad, sobriedad y pobreza".
Como anuncio ayer, antes de la ceremonia de imposición de las birretas y anillos cardenalicios, el papa ha convocado una reunión del Colegio cardenalicio para reflexionar sobre temas vinculados a la familia.
En su primer consistorio, el papa ha nombrado a 19 nuevos purpurados, entre ellos tres no electores al ser mayores de 80 años.
En estas primeras designaciones, el papa ha prestado su atención a Latinoamérica y serán cardenales el arzobispo de Managua (Nicaragua), Leopoldo José Brenes Solórzano; el de Río de Janeiro (Brasil), Orani João Tempesta, el de Santiago de Chile, Ricardo Ezzati Andrello; de Les Cayes (Haití), Chibly Langlois, y el sustituto del papa como arzobispo de Buenos Aires, Mario Aurelio Poli.
El papa también nombró al arzobispo de Ouagadougou (Burkina Faso), Philippe Nakellentuba Ouédraogo; de Cotabato (Filipinas), Orlando Quevedo; y de Abiyán (Costa de Marfil), Jean-Pierre Kutwa.
El papa también incluirá en el colegio cardenalicio a tres arzobispos eméritos que superan los 80 años de edad y entre estos se encuentra el español Fernando Sebastián Aguilar, de 85 años, y arzobispo emérito de Pamplona y Tudela.